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jueves, 20 de febrero de 2014
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miércoles, 19 de febrero de 2014
Portafolio botanica
LA
RAIZ
En botánica, la raíz es
un órgano generalmente subterráneo y carente de hojas que crece en dirección
inversa al tallo y cuyas funciones principales son la fijación de la planta al
suelo y la absorción de agua y sales minerales. La raíz está presente en todas
las plantas vasculares exceptuando algunas pteridofitas que presentan rizoides
y algunas plantas acuáticas.1 La raíz del embrión llamada radícula es la primera de las partes de la semilla que
crece durante la germinación. La radícula, entonces, se desarrolla originando
la raíz primaria con su tejido de protección en el ápice, denominada caliptra.
La radícula crece y se fija al suelo desde los primeros estadios del
crecimiento de la planta, con lo cual se garantiza el posterior desarrollo de
la misma. En las plantas monocotiledóneas, la radícula aborta en los estados
iniciales del desarrollo, por lo que el sistema radical está conformado por
raíces que surgen de la base del tallo, las que por ese motivo— se denominan
raíces adventicias. En las gimnospermas y dicotiledóneas la raíz primaria
produce, por alargamiento y ramificación, el sistema radical alorrizo,
caracterizado porque hay una raíz central, principal, nítida y dominante sobre
las raíces laterales. En las monocotiledóneas y en las pteridofitas, en cambio,
el sistema radical de la planta adulta se forma por encima del lugar de origen
de la raíz primaria que aborta tempranamente. El sistema radical de estas
plantas se denomina homorrizo, fasciculado, en cabellera o fibroso, y está
formado por un conjunto de raíces adventicias y se halla profusamente ramificado.
Las raíces pueden
experimentar modificaciones estructurales pronunciadas, que pueden ser
consideradas, en la mayoría de los casos, como adaptaciones al medio ambiente,
o bien, la consecuencia de una especialización funcional diferente a la función
típica de este órgano. Entre éstas se encuentran las raíces reservantes y las
raíces especializadas como órganos de sostén y fijación.
La porción de suelo que
envuelve a las raíces de las plantas se denomina rizosfera y es una zona donde
se producen una serie de relaciones físicas y químicas que afectan a la
estructura del suelo y a los organismos que viven en él, proporcionándole unas
propiedades diferentes. La rizosfera normalmente ocupa entre unos cuantos
milímetros o algunos centímetros alrededor de la raíz. Esta región se
caracteriza por el aumento de la biomasa microbiana y de su actividad. La
comunidad de la rizosfera consiste en una microbiota (bacterias, hongos y
algas) y una micro y mesofauna (protozoos, nematodos, insectos y ácaros). Las
micorrizas constituyen una simbiosis especialmente importante, que ocurre en la
mayoría de los grupos de plantas vasculares. El término define a la simbiosis
entre un hongo y las raíces de una planta. Como en otras relaciones
simbióticas, ambos participantes obtienen beneficios. En este caso la planta
recibe del hongo principalmente nutrientes minerales y agua y el hongo obtiene
de la planta hidratos de carbono y vitaminas que él por sí mismo es incapaz de
sintetizar mientras que ella lo puede hacer gracias a la fotosíntesis y otras
reacciones internas. Los nódulos radicales son asociaciones simbióticas entre
bacterias y plantas superiores. La más conocida es la de Rhizobium con especies
de la familia de las leguminosas. La planta proporciona a la bacteria
compuestos carbonados como fuente de energía y un entorno protector, y recibe
nitrógeno en una forma utilizable para la formación de proteínas.
Las raíces
evolucionaron en los esporofitos de por lo menos dos linajes diferentes de las
plantas vasculares durante su principal radiación adaptativa sobre la Tierra en
el período Devónico inferior (hace unos 410 a 395 millones de años). Ese hecho
ocurrió aproximadamente unos 15 millones de años después de la aparición de las
traqueófitas y unos 50 millones de años después de las primeras embriófitas con
afinidad presunta con las briófitas. Ambos grupos se conocen solo por sus
esporas pero se supone que tenían algún órgano de anclaje al sustrato. Para el
Devónico intermedio a tardío, la mayoría de los grupos de plantas desarrollaron
un sistema radicular de alguna naturaleza. A medida que las raíces se hacían
más largas, podían sustentar estructuras aéreas más altas y podían explorar el
sustrato a mayor profundidad. Esta exploración más eficiente del suelo tuvo
profundos efectos ecológicos: no solo permitió a las plantas la conquista de
nuevos hábitats sino también la posterior colonización de los mismos por los
animales y los hongos.

Origen
y distribución
La raíz se origina a
partir de la radícula del embrión, o polo radical del eje embrionario, y se
conoce como «raíz principal» o «raíz primaria». Es la primera de las partes del
embrión que se desarrolla durante la germinación de la semilla. La radícula,
entonces, con una cubierta en su punta llamada coleorriza, se desarrolla
originando la raíz primaria con su tejido de protección en el ápice, denominada
caliptra, cofia o pilorriza. La radícula crece y se fija al suelo desde los
primeros estadios, de esta modo se garantiza el posterior crecimiento y
desarrollo de la planta. En las plantas monocotiledóneas, la radícula aborta en
estados tempranos de desarrollo, por lo que el sistema radical está conformado
por raíces que surgen de la base del tallo, las que por ese motivo se denominan
raíces adventicias.
La raíz está presente
en todas las plantas vasculares exceptuando algunas pteridófitas como las
psilotáceas que presentan rizoides. Ciertas espermatófitas especializadas
carecen de raíz porque se atrofia el polo radical y el embrión no presenta
radícula. Entre estos casos particulares se hallan varias especies de plantas
acuáticas, tales como Wolffia, Utricularia y Ceratophyllum demersum, y de
plantas epífitas como Tillandsia usneoides y algunas orquídeas. Algunas de
estas especies pueden formar raíces adventicias para sustituir a la raíz
principal. En Salvinia, una pteridófita acuática, la función de la raíz es
desempeñada por hojas modificadas.
Sistema
radicular
El conjunto de raíces
de una misma planta se denomina sistema radical o sistema radicular. Según su
origen y desarrollo se distinguen dos tipos de sistemas radiculares, los cuales
están asociados a grupos diferentes de plantas. En las gimnospermas y
dicotiledóneas la raíz primaria produce, por alargamiento y ramificación, el
sistema radical alorrizo, caracterizado porque hay una raíz central, principal,
nítida y dominante sobre las raíces laterales, las que no son morfológicamente
equivalentes. El sistema radical generalmente es unitario, presenta
ramificación racemosa y acrópeta, es decir, que progresa hacia el ápice. En
este sistema la raíz se dice axonomorfa o pivotante, tiene raíces de segundo a
quinto orden y crecimiento secundario.
En las monocotiledóneas
y en las pteridófitas, la raíz embrionaria por lo general muere pronto y el
sistema radical de la planta adulta se forma por encima del lugar de origen de
la raíz primaria. El sistema radical se denomina homorrizo, fasciculado, en
cabellera o fibroso, y está formado por un conjunto de raíces adventicias y se
halla profusamente ramificado.
Funciones
La raíz cumple varias
funciones en la planta. Por un lado, permite el anclaje o fijación de la planta
al suelo. El tamaño relativo de las raíces determinan también la posibilidad de
que una planta pueda tener un mayor o menor desarrollo del vástago aéreo. La
raíz también permite la absorción del agua y de los nutrientes minerales
disueltos en ella desde el suelo y su transporte al resto de la planta.
Asimismo, la raíz es el soporte de asociaciones simbióticas complejas con
varios tipos de microorganismos, tales como bacterias y hongos, que ayudan a la
disolución del fósforo inorgánico del suelo, a la fijación del nitrógeno
atmosférico y al desarrollo de las raíces secundarias.
Además de estas tres
funciones que son generales para todas las plantas superiores, la raíz de
algunas especies están especializadas en la acumulación o almacenamiento de
reservas. Así, las plantas bienales como la zanahoria (Daucus carota) almacenan
en la raíz durante el primer año reservas que utilizarán el segundo año para
producir flores, frutos y semillas. En algunas plantas como Isoetes (una
pteridófita) y Littorella (una dicotiledónea de la familia de las
plantagináceas) las raíces transportan dióxido de carbono para la fotosíntesis,
ya que sus hojas usualmente carecen de estomas.
La raíz, por otro lado,
tiene un papel fundamental en la creación y protección del suelo. Las moléculas
y enzimas segregadas por las raíces y sus relaciones simbióticas contribuyen a
la formación de suelo. Las raíces de numerosos árboles segregan ácidos
orgánicos bastante potentes para disolver piedras calizas y liberar el calcio y
otros minerales útiles. Además, las raíces de numerosas especies contribuyen a
la fijación del suelo y a protegerlo de la erosión hídrica y eólica.
Morfología
En la raíz primaria se
distingue externamente la caliptra, que se encuentra en el ápice protegiendo al
meristema apical, una zona de crecimiento o alargamiento, que es una región
glabra de 1 a 2 mm de longitud; la zona pilífera, región de los pelos
absorbentes, y la zona de ramificación, una región sin pelos en la cual se
forman las raíces laterales y que se extiende hasta el cuello, que la une al
tallo.
La proliferación del
tejido meristemático o de crecimiento origina las células que, tras su
diferenciación, forman los tejidos adultos de la raíz. Entre tales tejidos se
encuentran el parénquima, los tejidos vasculares y, en aquellas raíces que se
deben engrosar en años sucesivos, meristemas remanentes —como el cámbium y el
felógeno— responsables del crecimiento secundario o crecimiento en grosor de la
raíz.
La forma general de las
raíces es filamentosa, aún cuando también se puede presentar en forma cónica,
oblonga, napiforme, tortuosa o laminar. Cada especie tiene una forma
característica, la cual puede modificarse según las diferentes condiciones
ambientales en las que la planta crezca. De hecho, su apariencia depende del
tipo de sustrato en el que se desarrolle.

Ramificación
de la raíz
La raíz primaria o
principal desarrolla en el suelo un sistema de raíces mediante ramificaciones
que van progresando hacia el ápice y ulterior ramificación de las raíces
laterales (de primer orden) así formadas. Este sistema puede a veces superar en
longitud y extensión al sistema de vástagos que se desarrolla por encima del
nivel del suelo. Si se suma la longitud de todas las raíces de una planta se
hallan valores sorprendentemente elevados: una planta de trigo, por ejemplo,
cultivada en forma aislada, alcanza una longitud total de raíces de unos 80
km.18 Mientras que las ramificaciones del vástago son exógenas —se originan en
las yemas— las ramificaciones de la raíz son endógenas, es decir, se originan
en los tejidos internos. En las pteridófitas se forman a partir de la
endodermis, en las angiospermas y en las gimnospermas, en cambio, se forman en
el periciclo. No obstante, todas las ramificaciones de la raíz se inician por
divisiones celulares anticlinales y periclinales en un grupo de células que
forman el primordio de la raíz lateral, el cual crece, penetra en el córtex y
luego continúa creciendo hasta emerger a través de la rizodermis. Antes de que
la raíz lateral emerja a la superficie quedan delimitadas todas las regiones
anatómicas propias de la estructura de la raíz: el meristema apical, la
caliptra, el córtex y el cilindro vascular. El sistema vascular de las raíces
laterales es independiente del de la raíz principal, se forma a partir del
meristema apical de la raíz lateral, pero la relación entre ambos se establece
a través de células intermedias (traqueidas y elementos cribosos) que se
originan en el periciclo.19
Cada raíz tiene un
número definido de filas de raíces laterales, los que se denominan
«rizósticos». Las raíces con más de dos polos de xilema, forman tantas filas de
raíces como polos hay. En varias familias de monocotiledóneas con raíces
poliarcas —tales como las gramíneas, las juncáceas y las ciperáceas— las raíces
laterales se forman frente a los polos de floema, mientras en las
dicotiledóneas se forman frente a los polos de xilema. Las bromeliáceas
constituyen una excepción dentro de las monocotiledóneas ya que sus raíces
laterales se forman frente a los polos de xilema. Por otro lado, en las raíces
diarcas, las raíces laterales se originan entre los polos de xilema y floema,
razón por la cual presentan cuatro filas de raíces laterales, es decir el doble
que el número de polos.

Raíces
adventicia
Las raíces adventicias
son aquellas que no provienen de la radícula del embrión, sino que se originan
en cualquier otro lugar de la planta, como por ejemplo en alguna porción del
vástago, en tallos subterráneos y en raíces viejas. Pueden tener o no
ramificaciones, pero tienen una forma y un tamaño relativamente homogéneo,
formando sistemas radicales fibrosos. Generalmente no presentan crecimiento
secundario. Su duración varía, en algunos pastos perennes pueden durar varios
años.20 En muchas monocotiledóneas como la gramilla (Cynodon dactylon) y
dicotiledóneas como la frutilla (Fragaria), que presentan tallos postrados, en
cada nudo nace un fascículo de raíces adventicias.
Algunas plantas con un
solo tallo, como las palmeras Socratea y Pandanus, logran mayor estabilidad
desarrollando raíces adventicias llamadas raíces fúlcreas o raíces zancos.
Dichas raíces también se encuentran en gramíneas como el maíz y el sorgo. Son
gruesas, se originan en los nudos basales y penetran al suelo donde cumplen una
doble función: sostén y absorción.
Esquejes de hiedra
(Hedera) mostrando las raíces adventicias que se han formado en sus bases. Cada
uno de estos esquejes enraizados permiten propagar la planta original.
Las raíces adventicias
comúnmente se originan de un modo endógeno en la cercanía de los tejidos
vasculares del tallo, por lo que se facilita la conexión vascular entre ambos
órganos. No obstante, también pueden originarse en la periferia del tallo o
cerca del cámbium, en el parénquima interfascicular o en los radios vasculares
y también en el periciclo o en la médula del tallo. A veces, las raíces
adventicias pueden tener un origen exógeno, ya que se originan en la epidermis
y en los tejidos corticales o bien, en los tejidos de los márgenes de las hojas
y de los pecíolos.
La propiedad de muchas
especies de formar raíces adventicias a partir de los extremos cortados de sus
tallos se utiliza como medio de multiplicación asexual por medio de esquejes.
Algunas especies, tales como los sauces y los geranios, arraigan con mucha
facilidad, mientras que otras, como las coníferas, casi nunca emiten raíces si
los esquejes no son previamente sometidos a un tratamiento especial. Tal
tratamiento de los esquejes involucra la aplicación de fitohormonas, compuestos
que las plantas sintetizan de forma natural para estimular la formación de
raíces nuevas. Casi todos los preparados comerciales de este tipo contienen
ácido indolacético, uno de los estimulantes más conocidos para la formación de
raíces. En ocasiones, las raíces pueden originarse de las hojas, como ocurre en
la violeta africana, especie que se puede propagar sumergiendo en agua el borde
cortado de una hoja. Las raíces de algunas plantas también emiten brotes; así,
los tallos que se forman a distancias variables de la base del chopo negro
brotan desde las raíces del árbol.
EL
TALLO
En botánica, el tallo
es el eje de la parte aérea de las cormófitas y es el órgano que sostiene a las
hojas, flores y frutos. Sus funciones principales son las de sostén y de
transporte de fotosintatos (carbohidratos y otros compuestos que se producen
durante la fotosíntesis) entre las raíces y las hojas.
Se diferencia de la
raíz por la presencia de nudos en los que se insertan las yemas axilares y las
hojas y por su geotropismo negativo, es decir, que crecen en contra de la
fuerza de gravedad. Entre los cormófitos existen especies con un solo tallo
cuyo vástago no se ramifica y plantas con muchos tallos (pluricaules) cuyo
vástago se ramifica de diversos modos de acuerdo a la actividad de los
meristemas.
Arquitectura
del tallo
Desde el punto de vista
de la Anatomía, el tallo está constituido por tres sistemas de tejidos: el
dérmico, el fundamental y el vascular o fascicular. Las variaciones en la
estructura de los tallos de diferentes especies y de los taxones mayores se
basan principalmente en las diferencias en la distribución relativa de los
tejidos fundamental y vascular. El crecimiento en longitud del tallo se debe a
la actividad de los meristemas apicales y al alargamiento subsecuente de los
entrenudos y se denomina crecimiento primario. El crecimiento secundario se
caracteriza por el aumento del grosor del tallo y es el resultado de la
actividad de los denominados meristemas secundarios (cámbium y felógeno). Este
tipo de crecimiento es característico de las gimnospermas y la mayoría de las
eudicotiledóneas arbóreas y arbustivas y da como resultado la producción de
madera.
Los tallos se
clasifican desde diversos puntos de vista, los cuales van desde la consistencia
hasta las modificaciones que pudieran presentar para adaptarse a diferentes
ambientes. Tal diversidad es la base de la gran cantidad de aplicaciones
económicas que tienen los tallos, desde la alimenticia hasta las más variadas
industrias.
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Definición
Se define como todo
órgano aéreo o subterráneo, verde o incoloro, derecho, rastrero o trepador,
portador de hojas (sean éstas verdes, reducidas a escamas o cicatrices
foliares), flores y frutos. A diferencia de las raíces, el tallo presenta
geotropismo negativo, tiene nudos (lugares donde se originan las hojas) y
entrenudos (regiones entre dos nudos consecutivos), yemas (áreas del tallo
situadas justo por encima del punto de inserción de la hoja apical y axilares)
y por lo común hojas bien desarrolladas. El tallo se forma a partir de la yema
caulinar en la plántula o de las yemas secundarias en las ramificaciones. Estas
ramificaciones pueden producirse mediante dos sistemas: monopódico o simpódico.
Funciones
Es el eje de la planta
que sostiene las hojas, órganos de asimilación con forma aplanada, las cuales
se disponen de un modo favorable para captar la mayor cantidad de radiación
solar con el mínimo sombreamiento mutuo (ver filotaxis). En las plantas que no
presentan hojas identificables como tales, como en la mayoría de las cactáceas,
el tallo se encarga de la fotosíntesis. En el momento de la reproducción, el
tallo sostiene también las flores y los frutos. En muchas especies, el tallo es
además uno de los órganos de reserva de agua y fotoasimilados, especialmente
con antelación a la etapa reproductiva.
No obstante, la función
principal del tallo es la de constituir la vía de circulación de agua entre las
raíces y las hojas de las plantas. Puede tener muchos metros de altura, el
tallo leñoso más largo que se conoce es el de la palmera trepadora Calamus
manan de 185 m.
El flujo de agua a
través de la planta se realiza debido a las diferencias en el potencial hídrico
entre la atmósfera y el suelo, siendo el xilema el tejido conductor. El flujo
de agua en el xilema es un proceso físico, en donde la energía necesaria para
que se lleve a cabo proviene de la transpiración del agua desde las estomas de
las hojas hacia la atmósfera. Como consecuencia de tal transpiración, se
produce una deficiencia de agua en las células del mesófilo de la hoja, el cual
hace que el agua fluya desde las células más internas con un mayor potencial de
agua. La deficiencia hídrica inicial se propaga sucesivamente hasta llegar a la
altura de los conductos del xilema. La naturaleza capilar del xilema, las
propiedades de cohesión de las moléculas de agua entre sí, la adhesión del agua
a las paredes celulares y la tensión desarrollada por diferencias en el
potencial hídrico originadas en la transpiración, permiten en conjunto, el
movimiento de la columna de agua desde la raíz hasta las hojas.
Morfología
El tallo, en general,
es un órgano cilíndrico que posee puntos engrosados –nudos- sobre los que se
desarrollan las hojas. A la porción de tallo situada entre dos nudos
consecutivos se le denomina entrenudo. Presenta además una yema terminal en el
extremo apical y varias yemas axilares que se diferencian en las axilas de las
hojas.
Yemas
Una yema es el extremo
joven de un vástago, y por lo tanto además del meristema apical, lleva hojas
inmaduras o primordios foliares. La yema situada en el extremo del eje es la
yema terminal, mientras que las que se encuentran en la unión de las hojas con
el tallo son las yemas axilares. En ciertos casos es difícil distinguir las
yemas del resto del tallo, especialmente cuando los primordios no están
claramente agrupados, como sucede en el espárrago (Asparagus officinalis) y en
especies de gran porte de las monocotiledóneas como Agave y Pandanus.
De acuerdo a su
estructura se distinguen dos tipos de yemas, las yemas escamosas y las yemas
desnudas.
El ápice de las yemas
escamosas está protegido por hojas modificadas con aspecto escamoso, dispuestas
apretadamente. Generalmente estas escamas, pérulas o tegmentos son oscuras y
coriáceas, cumplen el rol de protección del ápice vegetativo. Las escamas,
estrechamente aplicadas unas sobre otras y provistas de una gruesa cutícula,
impiden la desecación de los tejidos embrionales durante el invierno, cuando la
circulación de la savia es más lenta. Si se hace un corte longitudinal de la yema,
se observa, por debajo de las escamas protectoras el ápice vegetativo, asiento
del meristema apical del tallo y los primordios foliares. Cuando en la
primavera el meristema inicia su actividad, las escamas caen, y los primordios
foliares se desarrollan en hojas adultas. En Eucalyptus las yemas pueden tener
hasta 50 pares de primordios foliares. Suelen tener pelos en abundancia que
retienen el aire y constituyen un abrigo para el meristema, protegiéndolo de
las variaciones térmicas bruscas. Las escamas pueden tener coléteres,
estructuras glandulares secretoras de sustancias pegajosas como mucílagos y
resinas, que contribuyen a la defensa contra la desecación al asegurar una
mayor impermeabilidad; son comunes sobre todo en las plantas de deciduas. Las
yemas desnudas están desprovistas de escamas protectoras y en este caso
generalmente están protegidas por las hojas jóvenes. Estas yemas se presentan
generalmente en plantas herbáceas.9
Las yemas axilares son
generalmente únicas, es decir que en la axila de cada hoja nace una sola yema;
en algunas especies, sin embargo, pueden presentarse yemas axilares múltiples o
supletorias que originan flores, ramas, espinas o zarcillos. Según cómo estén
dispuestas, hay dos tipos de yemas múltiples: seriales y colaterales. Las yemas
seriales están situadas una por encima de la otra en la axila de la hoja
tectriz, formando una fila vertical, como por ejemplo en el mburucuyá
(Passiflora caerulea), en la madreselva (Lonicera japonica) y en la santa rita
(Bougainvillea spectabilis), como así también están presentes en las
bignoniáceas, las fabáceas y las rubiáceas). Las yemas colaterales o adyacentes
se encuentran situadas una al lado de la otra en la axila de una misma hoja
formando una fila horizontal. En el ajo (Allium sativum), cada diente es una
yema axilar; en las inflorescencias del bananero (Musa) cada conjunto de yemas
originará una "mano" de bananas. También están presentes en las
aráceas y en las palmeras.9
El fenómeno de la
caulifloria (árboles o arbustos que producen las flores en el tronco y en las
ramas añosas) se debe al desarrollo tardío (años o décadas después) de yemas
durmientes que quedan en la corteza del tallo.
Tipos de tallos
Los tallos pueden
clasificarse desde diversos puntos de vista, los cuales van desde la
consistencia hasta las modificaciones adaptativas que pudieran presentar.
Por su hábito
·
Epígeos
o aéreos: son todos aquellos tallos que crecen, como su nombre lo indica, por
encima de la tierra. Incluyen los tallos normales con auténticas hojas y los estolones, siendo éstos
brotes laterales más o menos delgados y generalmente muy largos (como es el
ejemplo de la frutilla, Fragaria). De acuerdo con la dirección que sigue
su crecimiento, los tallos aéreos pueden ser rectos o ascendentes si crecen de forma vertical, o rastreros si crecen de forma horizontal sobre la tierra.
·
Hipógeos o subterráneos: son los tallos que crecen
debajo de la tierra y presentan catáfilos (hojas
rudimentarias). Dentro de este tipo de tallos se hallan los tubérculos, los rizomas y losbulbos, los cuales se describen a continuación:
·
Rizomas: son tallos subterráneos de longitud y grosor
variables, que crecen horizontalmente a profundidades diversas según las
especies. Los nudos llevan hojas pequeñas, y cada año producen raíces que
penetran en el suelo y tallos aéreos de vida corta —como es el caso del olluco— o simplemente
un grupo de hojas formando un pseudotallo (como por ejemplo, el lirio, Iris germanica). Frecuentemente, los rizomas
actúan como órganos de reserva de nutrientes.
·
Tubérculos: son tallos que
almacenan sustancias nutritivas. Tienen crecimiento limitado, no presentan
habitualmente raíces y suelen durar un solo periodo vegetativo. En su
superficie se observan catáfilos y yemas (denominadas “ojos”) y lenticelas.
·
Bulbos: son tallos muy cortos y erectos, usualmente con
forma de disco y con una yema terminal rodeada de varias hojas carnosas,
densamente superpuestas, convertidas en órganos de reserva, llamadas catáfilos, que recubren el ápice y lo protegen.
Según su consistencia,
·
Herbáceos: se trata de aquellos tallos que nunca desarrollan tejidos adultos o secundarios, por lo que
tienen una consistencia suave y frágil.
·
Escapo: es una tallo cuya única función es la de servir de
sostén a las flores y, posteriormente, a los frutos. Una vez terminada su
función, el escapo se seca y se cae. Puede presentar ramificaciones.
·
Cálamos:
son tallos aéreos, cilíndricos, que no presentan nudos, como por ejemplo, los
tallos de los juncos (Juncus).
·
Volubles:
son tallos flexibles y enrollables en un soporte, como por ejemplo el del
poroto (Phaseolus).
·
Trepadores:
son aquellos tallos que se fijan a un soporte mediante zarcillos, como por
ejemplo los tallos de la vid (Vitis).
·
Leñosos:
son tallos rígidos y duros, sin color verde ya que no presentan clorofila.
·
Arbustivos o Sufrútices: llegan a desarrollar tejidos
secundarios, pero sólo en la región próxima a la base, manteniendo la parte
superior de la planta siempre con tejidos jóvenes.
·
Arbóreos: Son tallos que desarrollan tejidos secundarios por
completo, limitando los primarios a las yemas tanto apicales como axilares. Son
de consistencia dura, la que se debe a la acumulación de súber en ellos.
·
Estípite: Son aquellos tallos monopodiales en los que la
única yema que se desarrolla es la apical, quedando todas la demás atrofiadas.
Es el caso de la mayoría de las palmeras.
·
Carnosos
o suculentos
Según las modificaciones estructurales que presenten, los tallos pueden ser
·
Zarcillo caulinar: es un tallo muy delgado que ha perdido
la capacidad de formar hojas y flores. Su función es la de permitirle a la
planta trepar o arrastrarse por diversas superficies.
·
Espina caulinar: se trata de una rama modificada y muy
lignificada que sirve como defensa contra los depredadores.
·
Estolón: es un tallo
cuya yema apical tiene la capacidad de formar raíces
adventicias,
lo que le permite formar una nueva planta.
Tallos fotosintéticos:
Son aquellos tallos
que han asumido las funciones de las hojas. Son propios de plantas que, por
razones adaptativas,
han dejado de formar hojas o estas se redujeron hasta volverserudimentarias,
o fueron modificadas hasta perder la capacidad fotosintética. Estos tallos, a
su vez, pueden ser:
·
platíclados, son tallos
aplanados y fotosintéticos que puede tener la forma de una hoja, como los filodios o filóclados,
los cuales son ramas aplanadas y de aspecto foliáceo, que puede llevar flores.
·
cladodios, son tallos planos y suculentos, típicos de muchas
especies de cactáceas (Opuntia por ejemplo),
los que además de la función de fotosíntesis también están especializados en el
almacenamiento de agua. A diferencia de los filodios, estos tallos
fotosintéticos presentan crecimiento indeterminado.
Anatomía
El tallo está
constituido por tres sistemas de tejidos: el dérmico, el fundamental y el
vascular o fascicular. Las variaciones en la estructura de los tallos de
diferentes especies y de los taxones mayores se basan principalmente en las
diferencias en la distribución relativa de los tejidos fundamental y vascular.
En las coníferas y dicotiledóneas el sistema vascular del entrenudo aparece
como un cilindro hueco que delimita una región externa y una interna de tejido
fundamental, la corteza y la médula, respectivamente. Las subdivisiones del
sistema vascular, los haces vasculares, están separados unos de otros por
paneles más o menos amplios de parénquima fundamental -llamado prenquima
interfascicular- que interconecta la médula y la corteza. Este tejido se
denomina interfascicular porque se encuentra entre los haces o fascículos. El
parénquima interfascicular a menudo se llama también radio medular. Los tallos
de muchos helechos, algunas dicotiledóneas herbáceas y la mayoría de las
monocotiledóneas tienen una ordenación compleja de tejidos vasculares. Los
haces vasculares pueden hallarse en más de un anillo o pueden aparecer
dispersos por toda la sección transversal del tallo. La delimitación del tejido
fundamental en corteza y médula es, en estos casos, menos precisa o no existe.4
El crecimiento en longitud del tallo se debe a la actividad de los meristemas
apicales y al alargamiento subsecuente de los entrenudos y se denomina
crecimiento primario. El crecimiento secundario se caracteriza por el aumento
del grosor del tallo y es el resultado de la actividad de los denominados
meristemas secundarios (cámbium y felógeno). Este tipo de crecimiento es
característico de las gimnospermas, la mayoría de las dicotiledóneas y algunas
monocotiledones.

Estructura
primaria del tallo
En un corte transversal, el tallo es generalmente cilíndrico, aunque a
veces puede ser aplanado, triangular o cuadrangular. El sistema vascular
primario consiste en un cilindro completo o bien en un sistema de haces
vasculares discretos. La epidermis del tallo frecuentemente lleva estomas y
tricomas, al igual que la de las hojas. La corteza es la región entre los
tejidos vasculares y la epidermis. Esta corteza primaria o córtex está formada
por tejidos fundamentales, en algunos casos sólo parénquima con función
asimiladora o reservante, y en otras ocasiones también por colénquima,
esclerénquima o ambos, con función mecánica. El conjunto entre la corteza y la
región vascular se denomina región pericíclica, de donde pueden surgir las
raíces adventicias. El cilindro central o estela es también llamado cilindro
vascular primario, ya que está constituido por los tejidos conductores (floema
y xilema primarios). Dichos tejidos en dicotiledóneas pueden formar un cilindro
hueco (cuyo centro está ocupado por una médula parenquimatosa), o bien aparecer
en forma de haces o cordones dispuestos en círculo alrededor de una médula
parenquimatosa y separados entre sí por porciones parenquimáticas, llamadas
radios medulares, que comunican la médula con la corteza. En monocotiledóneas,
el floema y xilema primarios conforman haces que se distribuyen de manera
dispersa y, por lo tanto, no se distingue médula ni radios medulares. En el
tallo la disposición de los tejidos vasculares es generalmente colateral, con
el floema primario dirigido hacia el exterior y el xilema primario hacia el
interior, o sea, hacia el centro del tallo. Sin embargo, pueden existir otras
disposiciones, por ejemplo, haces vasculares concéntricos. La médula es la
región central del tallo, formada por tejido parenquimático, si bien en muchas
especies puede reabsorberse y formar una cavidad central hueca.

Estela
El
sistema formado por los tejidos vasculares en el eje de la planta, tallo y
raíz, se denomina estela. El concepto de estela se elaboró para estudiar las
relaciones y homologías en la estructura del vástago de diferentes grupos de
plantas. Hay tres tipos básicos de estela según la distribución relativa del
sistema vascular y el sistema fundamental de los ejes en estado primario de
desarrollo: protostela, sifonostela y eustela, cada uno con variantes.
La
protostela es una columna sólida de tejidos vasculares ubicada en posición
central. Es el tipo más simple y el más primitivo filogenéticamente, el cual se
ha hallando en plantas fósiles como Psilophyton, una pteridófita de la era
Paleozoica. La protostela se encuentra en algunas pteridófitas actuales, como Psilotum
y Gleichenia, también en tallos de angiospermas acuáticas. Existen algunas
variantes de la protostela. Así, cuando la columna de xilema tiene forma
estrellada en el corte transversal, recibe el nombre de «actinostela». Cuando
el xilema está fraccionado en varias placas, se habla de «plectostela».
En
la sifonostela, el sistema vascular tiene forma de tubo, envolviendo una médula
parenquimática. No presenta lagunas foliares. Según la posición del floema, se
distinguen dos tipos: la sifonostela anfifloica, con el floema por fuera y por
dentro, sin lagunas foliares. Es exclusiva de las pteridofitas (Gleicheniaceae,
Schizaeaceae, Marsileaceae) y la sifonostela ectofloica, en la que el floema se
encuentra por fuera del xilema. Este último tipo se encuentra en los tallos de
algunas pteridófitas y en raíces de Spermatophyta. La dictiostela es una
variante de la sifonostela anfifloica con lagunas foliares muy grandes, que
están superpuestas o solapadas. El sistema vascular, visto a lo largo, parece
una red cilíndrica. En corte transversal cada segmento es un haz vascular
concéntrico perifloemático. Se presenta, por ejemplo, en Polypodium,
Microgramma, Dryopteris.
En
la eustela el sistema vascular consta de haces vasculares organizados en
simpodios, dispuestos alrededor de una médula. Las lagunas foliares pueden o no
estar delimitadas (como en el caso de las gimnospermas y las dicotiledóneas),
según que el sistema vascular sea cerrado o abierto. Los haces vasculares son
abiertos, con cámbium fascicular, ya que la mayoría de estas plantas presenta
crecimiento secundario. La atactostela es una variante de la eustela,
característica de las monocotiledóneas, con haces vasculares colaterales o
concéntricos esparcidos regularmente en todo el tallo debido a su recorrido longitudinal
sinuoso. Los haces vasculares son cerrados, ya que este grupo de plantas no
presenta crecimiento secundario.
Actualmente
se sabe que la estela de las plantas con semilla (epermatófitos) no ha
evolucionado a partir de la sifonostela de los helechos, sino que se ha formado
por fragmentación de una protostela, del tipo hallado en las primeras plantas
con semilla (Progimnospermas).

Estructura
secundaria
La estructura secundaria del tallo se debe a la actividad de los
meristemas laterales: cámbium vascular y felógeno. El primero actúa en el
cilindro central, entre el floema y xilema primarios y el segundo se sitúa
periféricamente, en la corteza o la epidermis. Ambos meristemas producen nuevas
células en sentido radial, por lo que su actividad incrementa el grosor del
tallo. Como consecuencia de la actividad cambial se origina floema secundario y
células parenquimáticas (radios vasculares) hacia afuera, y xilema secundario y
radios vasculares hacia adentro. El felógeno produce hacia el interior células
parenquimáticas (felodermis) y hacia el exterior corcho (súber o felema). El
conjunto de estas tres capas: felógeno, felodermis y corcho constituye la
peridermis, la cual es la protección exterior del tallo cuando la epidermis se
desgarra durante el crecimiento en grosor. Existen tallos que sólo producen una
peridermis, pero también hay otros donde aparecen nuevas peridermis en zonas
cada vez más internas, intercaladas con capas de tejidos aisladas por ellas. En
esta situación se habla de ritidoma o corteza externa. La acción del cambium
vascular genera más cantidad de tejido vascular que finalmente puede disponerse
como un cilindro o quedar confinado a los haces vasculares existentes
previamente. Cuando se forman cilindros, la cantidad de xilema secundario puede
ser muy grande y se designa como madera o leño, y a los tallos con tal
característica se les llama leñosos, en contraste con los tallos herbáceos que
no producen tanta cantidad de xilema secundario (en cilindro o haces) o bien
sólo tienen tejidos primarios. El floema secundario se produce en menor
cantidad que el xilema y puede denominarse también líber, aunque este término
se aplica igualmente al floema primario.
Madera, albura y duramen
En la mayoría de los árboles la parte interna del leño (xilema secundario
originado por actividad del cámbium) cesa su actividad conductora de savia y
sus células parenquimáticas mueren, debido fundamentalmente a la desintegración
del protoplasma, al reforzamiento de las paredes con más lignina, a la
acumulación en el lumen o impregnación de las paredes con sustancias orgánicas
e inorgánicas (tales como taninos, aceites, gomas, resinas, colorantes,
compuestos aromáticos, carbonato de calcio, silicio) y al bloqueo de los vasos
con tílides. El leño que ha sufrido estos cambios es el duramen, inactivo y más
oscuro. Cuanto mayor es la impregnación, mayor es la resistencia a los
microorganismos que provocan la pudrición. La porción clara, externa, activa,
con células vivas es la albura. La proporción albura-duramen varía entre las
distintas especies, como también varía el grado de diferenciación entre ambas.
Estructura del xilema secundario
La
estructura característica del xilema secundario es la existencia de dos
sistemas de elementos, que difieren en la orientación de sus células: uno es
horizontal y el otro es vertical. El denominado sistema vertical, longitudinal
o axial está compuesto por células o filas de células con el eje mayor
orientado longitudinalmente, formado por elementos conductores no vivos y
células parenquimáticas vivas. El sistema horizontal, transversal o radial está
compuesto por hileras de células orientadas radialmente, formado por células
vivas principalmente, las células parenquimáticas de los radios medulares. Las
células vivas de los radios y del sistema axial se encuentran generalmente en
conexión formando un sistema continuo.
El
cámbium produce elementos de mayor diámetro en primavera (leño temprano) y de
menor diámetro y paredes más gruesas en invierno (leño tardío). De ese modo, la
actividad de todo el año origina un anillo de crecimiento. Cada año se suma un
nuevo anillo de crecimiento, los cuales pueden contarse a simple vista en el
corte transversal de un tronco. En la imagen se observa un anillo de
crecimiento en Robinia pseudoacacia, obsérvese la diferencia de diámetro de los
poros entre el leño temprano y el leño tardío.
El
xilema secundario producido durante un período anual de crecimiento constituye
una capa, que en corte transversal de tallo se llama anillo de crecimiento. Si
se observa a simple vista tiene una parte clara, que es el leño temprano o de
primavera, menos denso, con células de mayor diámetro y una parte oscura, que
es el leño tardío, sus células son pequeñas y de paredes más gruesas. Esto
ocurre generalmente en especies arbóreas que habitan en regiones de clima
templado. En las gimnospermas el tejido leñoso está constituido principalmente
por traqueidas, elementos imperforados con puntuaciones areoladas. En un anillo
de crecimiento se distingue el leño temprano formado por traqueidas, las cuales
son de mayor diámetro, y el leño tardío caracterizado por la presencia de
fibrotraqueidas de paredes gruesas, lumen reducido y puntuaciones areoladas con
abertura interna alargada. Las traqueidas y fibrotraqueidas miden entre 0,1 a
11 mm de longitud. Los radios medulares se hallan formados por una sola hilera
de células, por lo que se denominan uniseriados. Pueden estar formados sólo por
células parenquimáticas, como en los radios homocelulares, o también por
traqueidas cortas, dispuestas en forma horizontal, como en los radios
heterocelulares. El área de contacto entre un radio y las traqueidas del
sistema vertical se denomina campo de cruzamiento. El tipo de puntuaciones, su
número y su distribución son caracteres importantes para la identificación de
las maderas de las diferentes especies de gimnospermas. Cuando presentan un
canal resinífero los radios se denominan fusiformes.
El
xilema secundario de las angiospermas es más complejo que el de las
gimnospermas, razón por la cual se los describe como heteroxilo. Anatómicamente
las diferencias son el resultado de la ordenación de los elementos de vasos,
fibras y parénquima axial en un corte transversal. El elemento conductor de las
dicotiledóneas son los miembros de vasos. En corte transversal se denominan
"poros"; en las paredes laterales, los miembros de vaso poseen puntuaciones
areoladas, en algunas maderas, estas puntuaciones presentan la abertura interna
adornada, denominándose puntuaciones ornadas. La disposición de los poros en
corte transversal se denomina porosidad. Si los vasos son de tamaño uniforme y
se distribuyen más o menos homogéneamente a través del leño se dice que la
porosidad es difusa, Ej.: Populus alba, Eucalyptus y Olea europaea. Si los
vasos son de diferentes tamaños, y los formados en el leño temprano son
notablemente mayores que los del final del anillo de crecimiento, la porosidad
se conoce como circular o anular, ej.: Quercus. Los casos intermedios se
denominan porosidad semianular. El arreglo de los vasos puede verse en corte
transversal, variando en bandas tangenciales, cuando los vasos están ordenados
perpendiculares a los radios, las bandas pueden ser rectas u onduladas; en un
diseño radial o diagonal, o en un diseño dendrítico cuando su organización
presenta un diseño con ramificaciones. Los radios pueden ser uniseriados o
multiseriados, o sea, de varias hileras de espesor. Están formados por células
parenquimáticas exclusivamente, con puntuaciones simples. El parénquima axial
se dispone acompañando a los elementos verticales como las fibras y vasos. Las
fibras son las células de sostén, a mayor cantidad de estas células, mayor es
la dureza de la madera. Son células muertas, de paredes secundarias muy
gruesas.

La Flor
La
flor es la estructura reproductiva característica de las plantas llamadas
espermatofita o fanerógama. La función de una flor es producir semillas a
través de la reproducción sexual. Para las plantas, las semillas son la próxima
generación, y sirven como el principal medio a través del cual las especies se
perpetúan y se propagan.
Todas
las espermatofitas poseen flores que producirán semillas, pero la organización
interna de la flor es muy diferente en los dos principales grupos de
espermatofitas: las gimnospermas vivientes y las angiospermas. Las gimnospermas
pueden poseer flores que se reúnen en estróbilos, o bien la misma flor puede
ser un estróbilo de hojas fértiles. En cambio, una flor típica de angiosperma
está compuesta por cuatro tipos de hojas estructural y fisiológicamente
modificadas para producir y proteger los gametos. Tales hojas modificadas o
antófilos son los sépalos, pétalos, estambres y carpelos.1 Además, en las
angiospermas la flor da origen, tras la fertilización y por transformación de
algunas de sus partes, a un fruto que contiene las semillas.
El
grupo de las angiospermas, con más de 250.000 especies, es un linaje
evolutivamente exitoso que conforma la mayor parte de la flora terrestre
existente. La flor de angiosperma es el carácter definitorio del grupo y es,
probablemente, un factor clave en su éxito evolutivo. Es una estructura
compleja, cuyo plan organizacional está conservado en casi todos los miembros
del grupo, si bien presenta una tremenda diversidad en la morfología y
fisiología de todas y cada una de las piezas que la componen. La base genética
y adaptativa de tal diversidad está comenzando a comprenderse en profundidad,3
así como también su origen, que data del Cretácico inferior, y su posterior
evolución en estrecha interrelación con los animales que se encargan de
transportar los gametos.
Con
independencia de los aspectos señalados, la flor es un objeto importante para
los seres humanos. A través de la historia y de las diferentes culturas, la
flor siempre ha tenido un lugar en las sociedades humanas, ya sea por su
belleza intrínseca o por su simbolismo. De hecho, cultivamos especies para que
nos provean flores desde hace más de 5.000 años y, actualmente, ese arte se ha
transformado en una industria en continua expansión: la floricultura.

Definición
La
flor es un corto tallo de crecimiento determinado que lleva hojas modificadas
estructural y funcionalmente para realizar las funciones de producción de
gametos y de protección de los mismos, denominadas antófilos.
El
tallo se caracteriza por un crecimiento indeterminado. En contraste, la flor
muestra un crecimiento determinado, ya que su meristema apical cesa de
dividirse mitóticamente después de que ha producido todos los antófilos o
piezas florales. Las flores más especializadas tienen un período de crecimiento
más breve y producen un eje más corto y un número más definido de piezas
florales que las flores más primitivas. La disposición de los antófilos sobre
el eje, la presencia o ausencia de una o más piezas florales, el tamaño, la
pigmentación y la disposición relativa de las mismas son responsables de la
existencia de una gran variedad de tipos de flores. Tal diversidad es
particularmente importante en estudios filogenéticos y taxonómicos de las
angiospermas. La interpretación evolutiva de los diferentes tipos de flores
tiene en cuenta los aspectos de la adaptación de la estructura floral, particularmente
aquellos relacionados con la polinización, dispersión del fruto y de la semilla
y de la protección contra los predadores de las estructuras reproductivas.

Morfología de las flores:
diversidad y tendencias evolutivas
Con
más de 250.000 especies, las angiospermas forman un grupo taxonómico
evolutivamente exitoso que conforma la mayor parte de la flora terrestre
existente. La flor es el carácter definitorio del grupo y es, probablemente, un
factor clave en su éxito evolutivo.
La
flor está unida al tallo por un eje, denominado pedicelo, que se dilata en su
parte superior para formar el receptáculo en el cual se insertan las diversas
piezas florales, las cuales son hojas modificadas que están especializadas en
las funciones de reproducción y de protección. Desde afuera hacia adentro de
una flor típica de angiosperma se encuentran las denominadas piezas estériles,
con función de protección, y compuestas por sépalos y pétalos. Por dentro de
los pétalos se disponen las denominadas piezas fértiles, con función
reproductiva, e integrado por estambres y carpelos. Los carpelos de las
angiospermas son, con respecto a los carpelos de sus ancestros, una estructura
innovativa y privativa, ya que por primera vez en el linaje, encierran
completamente al óvulo, de forma que el polen no cae directamente en el óvulo
(como en las gimnospermas) sino en una nueva estructura del óvulo llamada
estigma, que recibe al polen y estimula la formación del tubo polínico que
llegará al óvulo para producirse la fecundación.
La
flor de angiosperma es una estructura compleja cuyo plan organizacional está
conservado en casi todas las angiospermas, con la notable excepción de
Lacandonia schismatica (Triuridaceae) que presenta los estambres en posición
central rodeados de los carpelos.8 9 Esta organización tan invariable no indica
en modo alguno que la estructura floral es conservada a través de los
diferentes linajes de angiospermas. Por el contrario, existe una tremenda
diversidad en la morfología y fisiología de todas y cada una de las piezas que
componen a la flor, cuya base genética y adaptativa está comenzando a
comprenderse en profundidad.
Se
ha sugerido que existe una tendencia en la evolución de la arquitectura floral,
desde un plan "abierto", en el que las variaciones están determinadas
por el número y disposición de las piezas florales, hacia un plan
"cerrado", en el cual el número y disposición de las piezas están
fijados.10 En tales estructuras fijas, las elaboraciones evolutivas ulteriores
pueden tener lugar a través de la concrescencia, o sea, por medio de la fusión
o estrecha conexión de las distintas partes. El plan de organización
"abierto" es común en las angiospermas basales y las primeras
eudicotiledóneas, mientras que el plan de organización "cerrado" es
la regla en el clado de las gunnéridas (o núcleo de las eudicotiledóneas) y en
las monocotiledóneas.
Cáliz
El cáliz es el
verticilo más externo de la flor. Tiene función protectora y está constituido
por los sépalos, generalmente de color verde. Si los sépalos están libres entre
sí, el cáliz se denominadialisépalo,
mientras que si están unidos se llama gamosépalo como en el "clavel" (Dianthus caryophyllus, cariofiláceas) o el "seibo" (Erythrina crista-galli, leguminosas).2
Cuando el cáliz es
gamosépalo se pueden distinguir tres partes bien definidas: el tubo,
que es la porción en la cual los sépalos están unidos; lagarganta, que es el sitio en que los
sépalos se separan unos de otros; y el limbo, que es la porción libre,
formada por los extremos apicales de cada sépalo o lóbulos.
Los sépalos pueden
tener consistencia y forma variadas. En la familia de las compuestas, por ejemplo, los sépalos están
reducidos a pelos o cerdas que constituyen el denominado papus o vilano.
Según su duración
con respecto a las otras piezas florales, el cáliz puede ser efímero o fugaz, cuando los sépalos caen al
abrirse la flor, como en la "amapola" (Papaver rhoeas, papaveráceas); deciduo, cuando los sépalos se
desprenden después de que ha ocurrido la fecundación; o persistentecuando
permanece después de la fecundación y acompaña al fruto, como en el caso del
"manzano" (Malus domestica, rosáceas).22 23 14 Los
sépalos pueden formar espolones que llevan néctar (se dicen espolones nectaríferos) para
atraer a los polinizadores como ocurre en Viola y Tropaeolum,. En otras especies como por ejemplo
en la "alegría" (Impatiens balsamina), algunas de las piezas del cáliz
adquieren la forma y coloración de los pétalos y, por esa razón, se las
adjetiva como "petaloides".
Corola
La corola es el verticilo interno del perianto y
el que rodea a los verticilos fértiles de la flor. Está compuesto por antófilos
denominados pétalos, los que son generalmente mayores que los
sépalos y son coloreados.
Detalle
de un pétalo de
"clavel"(Dianthus). La parte inferior, más angosta y de
color verde o blanquecina, es la uña; la parte más ancha y coloreada
es el limbo del pétalo.
Flor
de Mimulus. Flor bajo luz natural (izquierda) y bajo luz
ultravioleta (derecha) mostrando las Guías de néctar que no son
visibles para el ojo humano.
Cada pétalo consta
de una uña que lo fija al receptáculo y
una lámina o limbo que es la parte más ancha y vistosa.
La uña puede ser muy corta, como en Rosa o
muy larga como en el "clavel" (Dianthus).
La lámina puede ser de forma, color y margen muy variado.2 Si
los pétalos son libres entre sí la corola se denomina dialipétala;
si, en cambio, se hallan unidos entre sí a través de sus márgenes, la corola se
dice gamopétala y, como
en el caso del cáliz, presenta tubo, garganta y limbo.
La forma de la
corola gamopétala puede ser muy variada: tubulosa (con forma de cilindro, como en las
flores centrales de los capítulos de la familia de las compuestas), infundibuliforme (con forma de embudo, como en el caso
de la "batata", Ipomoea batatas, convolvuláceas); campanulada (como un tubo inflado, parecido a una
campana, como en el "muguet", Convallaria majalis, ruscáceas), hipocrateriforme (con forma de tubo largo y delgado,
como en Jasminum), labiada (con el limbo formado por dos
segmentos desiguales, como en el caso de Salvia splendens, una lamiácea), ligulada (con el limbo con forma de lengüeta,
la cual se observa en las flores periféricas de los capítulos de muchas
compuestas) y espolonada (cuando presenta uno o varios
espolones nectaríferos, como en el caso de Aquilegia).
La anatomía de los
tépalos y pétalos es similar a la de los sépalos. Las paredes de las células
epidérmicas frecuentemente son convexas o papilosas, especialmente en la cara
adaxial. En muchos pétalos, como los de Brassica napus,
las papilas son cónicas, con un engrosamiento cuticular marcado en el ápice, y
estrías radiales hacia la base. Se ha sugerido que estos engrosamientos
permiten una difusión pareja de la luz emergente, de manera que el brillo de
los pétalos es uniforme en cualquier ángulo de iluminación. Algunas células
epidérmicas de los pétalos son osmóforos, contienenaceites esenciales que imparten la fragancia
característica a las flores. El mesófilo generalmente no presenta parénquima clorofiliano,
sino parénquima fundamental.
El color de los
pétalos resulta de la presencia de pigmentos. En muchas flores las células presentan cromoplastos con
pigmentos carotenoides (rojos,
anaranjados, amarillos). Los pigmentos más importantes son los flavonoides, principalmente antocianinas, que se encuentran disueltos en elcitoplasma de
la célula; los pigmentos básicos son pelargonidina (de color rojo), cianidina (violeta), y delfinidina (azul), flavonoles (de color amarillo a marfil). El color
de los pigmentos antociánicos depende de la acidez (del pH)
del jugo celular: en la solanácea Brunfelsia pauciflora ("azucena del monte") las
flores son violáceas, pero al envejecer se vuelven blancas debido a un cambio
en el pH. El color blanco de muchas flores, como por ejemplo el de Magnolia
grandiflora, se debe al fenómeno de reflexión total de la luz. Los pétalos pueden
presentar espacios de aire en posición subepidérmica o una capa de células con
abundantes granos de almidón, y en ambos casos la luz se refleja. Los
colores oscuros, se deben a una absorción total de la luz operada por pigmentos
complementarios. En los cultivares de color negro de "tulipán" (Tulipa gesneriana), por
ejemplo, hay antocianina azul en las células epidérmicas y caroteno amarillo en
las subepidérmicas.
Ha sido establecido
que las piezas florales exhiben un mayor grado de absorbancia de luz ultravioleta (UV)
que las hojas. F.K. Richtmeyer en 1923 y F.E. Lutz en 1924 fueron los primeros
en advertir este fenómeno pero no hallaron una explicación al mismo. En 1933, Lotmar postuló que el
fenómeno debía tener un significado biológico. Karl Daumer en 1958 observó que,
como regla, las bases de los pétalos y los verticilos reproductivos absorben
más luz ultravioleta que las regiones periféricas de la corola. En 1972 se hallaron las bases de estos
patrones de reflectancia de la luz UV. Utilizando las flores liguladas de una
especie de Rudbeckia (compuestas), se demostró claramente
que la fuerte absorbancia en la base de las lígulas se debía a la existencia de flavonolglucósidos,
los cuales tienen su máximo espectro de absorción en la región del UV (340 a 380 nm de longitud de onda). Esta demostración brindó la base
química para la existencia de las guías de néctar de las plantas, las que son
invisibles al ojo humano pero a las cuales responden los insectos
polinizadores. En un estudio en el que se observaron los patrones de reflectividad de luz UV de 54 especies
pertenecientes a 22 familias, se observó que la fuerte absorción de luz UV
puede darse en la flor entera o bien en zonas limitadas, tales como las bases
de las corolas, las anteras o puntos precisos de los pétalos, en la zona de la
flor donde los insectos suelen aterrizar. Estas zonas se denominan "guías de néctar"
y sirven como medio de reclamo para los insectos polinizadores. El color
particular, visible sólo para los insectos, se denomina "púrpura de
abejas".
Androceo
El androceo es uno de los ciclos fértiles de las flores.
Las piezas que integran el androceo se denominan estambres, los cuales tienen
como función la generación de los gametofitos masculinos o granos de polen.
Diagrama
de una antera en sección transversal. 1: Filamento; 2: Teca; 3:Conectivo (los vasos
conductores en rojo); (también llamado esporangio).
Microfotografía
de una antera en sección
transversal. Se observan lo cuatrosacos
polínicos conteniendo los
granos depolen dispersos en su
interior.
Los estambres son
hojas muy modificadas formadas por un pie que se inserta en el receptáculo de
la flor, llamado filamento, y
una porción distal llamada antera.
El filamento es la parte estéril del estambre, puede ser muy largo, corto o
faltar, en ese caso las anteras se denominan sésiles. Generalmente es
filiforme, pero puede ser grueso, incluso petaloide, y puede estar provisto de
apéndices. La antera es la parte fértil del estambre y suele constar de dos
partes distinguibles, contiguas, llamadas tecas, unidas por una zona llamada conectivo, que es también por donde la antera se
une al filamento. Generalmente está formada por dos tecas, a veces puede estar
constituida por una sola teca como en las malváceas y cannáceas o
por tres en el caso. De Megatritheca (esterculiáceas). Si se corta la antera
perpendicularmente a su eje, se observa que cada antera contiene uno o dossacos polínicos que
se extienden en toda su longitud.
Después de la
maduración de los granos de polen se produce la dehiscencia o apertura de la
antera, lo que permite la salida de los granos de polen hacia el exterior. El
tejido responsable de este proceso de dehiscencia se llama endotecio. Si la
apertura se produce a través de toda la longitud del tabique que separa los
sacos polínicos, la dehiscencia se dice longitudinal, que es el caso más
frecuente. En otros casos el endotecio se localiza en zonas perfectamente
limitadas que se levantan como valvas o ventanillas. En la dehiscencia poricida (como en las solanáceas) no hay endotecio, sino que se produce
la destrucción del tejido en el ápice de la antera y se forman poros por donde
saldrá el polen.
El número de
estambres en cada flor es un carácter muy variable. Algunas especies de la
familia de las euforbiáceas tienen
flores con un solo estambre (se dicen monandras), las oleáceas presentan
dos estambres (flores diandras) y en las mirtáceas hay
numerosos (son poliandras). El número de estambres
puede o no ser igual al número de pétalos. Así, se dice que la flor es isostémona si presenta el mismo número de
estambres que de pétalos (como puede observarse en las liliáceas y amarilidáceas); anisostémona si es diferente la cantidad de pétalos
que de estambres (por ejemplo, en el género Brassica,
hay cuatro pétalos y seis estambres); diplostémona, cuando el número de
estambres duplica a la cantidad de pétalos (el género Kalanchoe,
por ejemplo, presenta cuatro pétalos y ocho estambres) y es polistémona cuando el número de estambres es más
que el doble de pétalos (como en Poncirus,
con cinco pétalos y numerosos estambres).
La disposición
helicoidal de numerosos estambres es la condición primitiva dentro de las
angiospermas, a la que se denomina poliandria primaria. La reducción del
número de estambres (oligomerización) y el paso de la condición verticilada a
cíclica fue una tendencia evolutiva dentro de las angiospermas; inicialmente a
través de la formación de varios ciclos de estambres, luego dos (diplostemonía) y, finalmente, uno
solo (haplostemonía). No
obstante, en algunos linajes de angiospermas no es infrecuente que el número de
estambres aumente (poliandria
secundaria), fenómeno que se observa en especies que ofrecen a sus
polinizadores una cantidad de polen especialmente grande.24 Muchas
veces las flores presentan un perianto reducido y los estambres son largos y
vistosos. En estos casos la función de atracción de los polinizadores la cumple
el mismo androceo. Este tipo de flores suele estar dispuesto en inflorescencias
que, por su forma, parecen cepillos o limpiatubos, como por ejemplo en algunas leguminosas (Inga uruguensis y Acacia caven) y en las mirtáceas (Callistemon rigidus).
Los estaminodios son
los estambres estériles que de forma normal aparecen en ciertas flores. Su
función es variada y puede tener que ver con la producción de néctar o con la función de atracción que
suelen cumplir los pétalos.
Gineceo
En las angiospermas el gineceo, también llamado pistilo, consta de uno o
más carpelos u hojas
carpelares que forman una cavidad, el ovario, dentro de la cual quedan protegidos los óvulos o primordios seminales, tanto de la desecación como del
ataque de insectos fitófagos.
El gineceo consta de tres partes: el ovario, parte inferior
abultada que forma una cavidad o lóculo en cuyo interior se encuentran los
óvulos; el estilo que es una columna más o menos alargada que soporta al
tercer componente del pistilo: el estigma. Éste está constituido por un tejido glandular
especializado para la recepción de los granos de polen. En ocasiones el estilo puede faltar, y en esos casos el
estigma se dice que es sésil.
Si los carpelos están separados o libres entre sí, el
gineceo se denomina dialicarpelar o apocárpico (como ocurre en las crasuláceas como Sedum yKalanchoe); si, por el contrario, los carpelos están soldados entre
sí se llama gamocarpelar o sincárpico, que es lo más frecuente.
En la flor dialicapelar cada carpelo constituye un pistilo,
mientras en la sincárpica hay un solo pistilo. Por ejemplo, Kalanchoe,
con cuatro carpelos libres, presenta cuatro pistilos. En el gineceo
gamocarpelar o sincárpico la unión de los carpelos puede afectar sólo a la
porción del ovario, por lo que quedan libres tanto los estilos como los estigmas
(ejemplo, el género Turnera); puede involucrar los ovarios y los estilos, quedando
libres los estigmas (como ocurre en las compuestas y en Hibiscus), por lo que se puede determinar el número de carpelos que
conforman el pistilo por observación de la cantidad de estigmas. Finalmente, en
muchas ocasiones la unión o soldadura de los carpelos es total. En estos casos
el número de carpelos puede determinarse a través del número de los lóbulos
estigmáticos (por ejemplo, en las bignoniáceas).
Esquema de las
posibles posiciones del ovario I ovario súpero, II ovario semiínfero,III ovario ínfero. a: androceo, g: gineceo, p:pétalos, s: sépalos, r: receptáculo.
El estilo es de
longitud variable, desde menos de 0,5 mm (estigma subsésil) hasta más de 30 cm
en ciertas variedades de maíz, que es lo que se conoce como barba de choclo. Generalmente nace en el ápice del
ovario, pero puede ser lateral o nacer aparentemente en la base (estilo
ginobásico).37 Desde
el punto de vista anatómico, el estilo puede ser sólido o hueco. En las plantas
con estilo hueco el tejido de transmisión (por donde crecen los tubos polínicos para
efectuar la fecundación) está constituido por una capa de células epidérmicas
bastante diferenciadas que rodean un canal hueco (el denominado canal
estilar). Los tubos polínicos crecen desde el estigma hacia el ovario a lo largo de la
superficie de ese canal, normalmente a través de una fina capa de mucílago. En las plantas que poseen estilos
sólidos, en cambio, las células epidérmicas se hallan íntimamente fusionadas y
no dejan ningún espacio entre sí. Los tubos polínicos, en este caso, crecen
entre las células del tejido de transmisión (como en el caso de Petunia)38 o
a través de las paredes celulares (como en Gossypium).39 El
tejido de transmisión en los estilos sólidos incluye una sustancia intercelular
que contiene pectina, comparable al mucílago que se encuentra
en el canal estilar de los estilos huecos.40 Desde
el punto de vista de la distribución de ambos tipos de estilos entre las
diferentes familias de angiospermas, los estilos sólidos se consideran típicos
de laseudicotiledóneas y son raros en las monocotiledóneas.
El estigma tiene
forma variable, plumoso en el caso de las gramíneas, en cabezuela en Citrus, lobulado en Cucurbita, petaloide
en Canna y hasta con forma de sombrilla
invertida en el caso de Sarracenia.
Tiene particularidades estructurales que permiten la germinación del polen y el
desarrollo del tubo polínico que llegará hasta los óvulos. Se ha comprobado que
el estigma está cubierto por proteínas hidrofílicas en la pared externa; son
probablemente las que actúan en el reconocimiento del polen adecuado y en las
reacciones de autoincompatibilidad,
en cuyo caso a veces de deposita calosa para detener la germinación del polen
incompatible.
Los estigmas se
dividen en dos grandes grupos: estigmas húmedos y secos.43 Los
estigmas húmedos liberan un exudado durante el período receptivo y se presentan
en familias como las orquidáceas, escrofulariáceas y solanáceas. Los estigmas húmedos pueden presentar
papilas (estigmas papilosos,
como en Annona, Mandevilla, Bignonia y Punica) o no presentarlas
(estigmas no papilosos, en Citrus, Impatiens, Opuntia y Tamarix ). Los estigmas secos no liberan
secreciones líquidas, sino que producen proteínas o ceras. Pueden ser plumosos (gramíneas) o no plumosos y, en este
caso, papilosos (Cordyline, Yucca Pelargonium o no papilosos (Asclepias, Capparis, Cyperus).
El ovario es la parte inferior del gineceo que
contiene a los óvulos a fecundar. Está formado de una o más hojas modificadas que reciben el nombre decarpelos. Dentro del ovario hay una o más
cavidades o "loculos" que contienen a los óvulos en espera de ser
fecundados. Los óvulos es insertan dentro del ovario en una zona denominada
placenta.
Una de las
terminologías de descripción del ovario se refiere al punto de inserción sobre
el receptáculo (donde las otras partes florales (periantio y androceo) se unen
y se fijan a la superficie del ovario. Si el ovario se sitúa arriba del punto
de inserción, será súpero; si es por debajo, ínfero.
El óvulo o rudimento seminal, nace sobre la placenta,
situada en la cara interna del carpelo. Son de tamaño reducido, de pocos
milímetros, y generalmente de forma ovoide, de allí su nombre. Cada óvulo
consta de un cuerpo de tejido compacto, la nucela y
un pie, el funículo, que lo une a la placenta. La región
basal, donde se unen el funículo y la nucela, es la cálaza o chalaza. La nucela está rodeada por
el o los tegumentos, los cuales son envolturas que parten de la cálaza y
dejan un orificio llamado micrópilo. Cada óvulo está inervado por un haz vascular que
atraviesa el funículo y llega hasta la cálaza. Este hacecillo puede ramificarse
e inervar los tegumentos. El número de tegumentos es constante en cada familia
o grupo de familias. Las gimnospermas, por ejemplo, tienen óvulos unitégmicos,
a excepción de las podocarpáceas que
presentan un segundo tegumento llamado epimacio. La mayoría de las
dicotiledóneas y monocotiledóneas tienen óvulos bitégmicos,
y el tegumento externo se llama primina y el interno secundina.
Los óvulos unitégmicos se presentan en muchas dicotiledóneas
gamopétalas y en las familias de monocotiledóneas orquídeas, gramíneas y
amarilidáceas. El micrópilo puede estar delimitado por uno de los tegumentos
(ejemplo, Lilium) o por ambos
tegumentos (como el caso de Gossypium).
La nucela tiene espesor variable. Si es pequeña, el óvulo se dice tenuinucelado;
si tiene varias capas de células por fuera del saco embrionario, se denomina crasinucelado.
La oósfera procede
de una espora,
denominada megáspora o macrospora, a través de un proceso
denominado megagametogénesis que consiste básicamente en divisiones mitóticas.
Su núcleoen general es haploide, o sea, posee la mitad de los cromosomas que
la planta que le dio origen. La oósfera se fusiona con uno de los núcleos
generativos del grano de polen durante
la doble fecundación para originar al embrión. El otro núcleo generativo se fusionará
con los núcleos polares de la célula media y originará al endosperma.
La disposición que
adoptan los óvulos dentro de la cavidad del ovario se denomina placentación. El número de placentas es, en
general, igual al número de carpelos que
forman el ovario. En ciertos casos, sin embargo, puede atrofiarse alguna de las
placentas y un ovario pluricarpelar llega a contener un sólo óvulo, como por
ejemplo en las gramíneas y
en las compuestas. Existen distintos tipos de
placentación. La placentación marginal, propia del
gineceo unicarpelar (leguminosas)
o dialicarpelar (magnoliáceas, ranunculáceas), donde cada carpelo tiene una sola
placenta que corresponde a la zona de soldadura de la hoja carpelar. La placentación
parietal, presente en las orquídeas, violáceas, pasifloráceas y cucurbitáceas, ocurre en el gineceo formado por
dos o más carpelos soldados por sus bordes formando una sola cavidad en el
ovario, de manera que cada placenta corresponde a los bordes de dos hojas
carpelares contiguas. La placentación axilar, propia de solanáceas, rutáceas, liliáceas e iridáceas, entre muchos otros ejemplos, ocurre en
el gineceo formado por dos o más carpelos soldados en que cada uno lleva la
placenta en el ángulo central, de manera que las suturas placentarias forman
una columna adentro del ovario. Los óvulos de cada lóculo quedan así aislados
de los vecinos por medio de los tabiques carpelares. Laplacentación central, propia de las primuláceas y cariofiláceas,
ocurre en gineceos uniloculares formados por dos o más carpelos unidos y donde
los óvulos están fijos sobre una columna central y sin tabiques con la pared
del ovario. La placentación basal, finalmente, ocurre en especies con gineceo
pluricarpelar y unilocular. El óvulo se dispone en el centro basal de la
cavidad del ovario y es típica de las familias de las poligonáceas, quenopodiáceas y compuestas.
Sexualidad
Flores
unisexuales de calabaza. Las imágenes de arriba pertenecen a flores masculinas
y las de abajo a flores femeninas.
La sexualidad floral está relacionada con la presencia o
ausencia de los verticilos reproductivos: androceo y gineceo. Las flores que
presentan ambos verticilos (o sea, que producirán tanto gametos femeninos como
masculinos) se dicen perfectas, bisexuales, monoclinas o, más frecuentemente,hermafroditas, como es el caso de las flores de la
"papa" o "patata" (Solanum tuberosum,
solanáceas). En muchas otras especies, por otro lado, las flores tienen un solo
verticilo reproductivo y se dicen diclinas, imperfectas o unisexuales, como ocurre en la
"morera" (Morus nigra, moráceas) y en la "calabaza" (Cucurbita maxima, cucurbitáceas). En el caso que tal verticilo sea
el androceo, las flores se denominan masculinas o estaminadas; mientras que si el
verticilo presente es el gineceo, las flores se denominan pistiladas o femeninas. Existen algunos casos en
que la flor no presenta ninguno de los verticilos reproductivos y solo muestra
sépalos y pétalos. La función de estas flores es el de especializarse, dentro
de un grupo de flores que sí son perfectas, en la atracción hacia la inflorescencia de
los insectos polinizadores. Tales flores, denominadas neutras o asexuales, se disponen usualmente en
la periferia de la inflorescencia y se pueden observar, por ejemplo, en muchas
especies de la familia de las compuestas, como la "margarita" (Bellis perennis)
o el "girasol" (Helianthus annuus).
Entre los botánicos
prevalece actualmente la opinión de que las flores hermafroditas son menos
evolucionadas que las flores unisexuales, al menos por las razones que se
exponen a continuación. En primer lugar, en casi todos los grupos de
angiospermas con flores unisexuales, se encuentran entre las flores femeninas y
masculinas rudimentos de estambres o carpelos (por ejemplo, en Castanea y Urtica). En segundo lugar, los grupos de
angiospermas más primitivos en cuanto a otros caracteres tienen principalmente
flores hermafroditas (por ejemplo, las magnoliáceas) ya que sólo este tipo de flores
hacen posible, en caso de polinización zoógama, la captación y cesión
simultánea del polen. Finalmente, el paso de la condición hermafrodita a la
unisexual ha sido determinada en numerosas ocasiones por vía selectiva a
consecuencia de una transformación secundaria de flores entomógamas en
anemógamas, como por ejemplo, en las aceráceas (Acer) y en algunas oleáceas (Fraxinus).
Fórmula y diagrama
floral
El diagrama floral es
una representación gráfica de la disposición de las piezas florales y de la
ordenación de los distintos verticilos, en un corte transversal de la flor. Cada
verticilo se representa, por convención, con una circunferencia concéntrica
alrededor del gineceo, indicado por un corte a la altura del ovario. Los
sépalos se dibujan como lúnulas blancas, los pétalos como lúnulas negras o, a
veces, coloreadas. Los estambres se simbolizan con cortes transversales de
antera, y el gineceo queda representado en el centro del diagrama por un corte
transversal del ovario. Generalmente las piezas de un verticilo alternan con
las piezas del verticilo anterior. Los estambres pueden estar opuestos o
alternos con respecto a los pétalos. La soldadura entre las piezas de cada
verticilo o de verticilos opuestos, se indica con líneas de puntos. Mediante
estos diagramas queda bien manifiesta la estructura floral, se deduce de él su
simetría, el número de miembros de cada verticilo, y tratándose de los sépalos
y pétalos, su prefloración, su soldadura o independencia; del androceo la
posición relativa de los estambres con respecto al perianto, la concrescencia o
separación de los mismos, su unión o autonomía con respecto a la corola y la
posición introrsa o extrorsa de las anteras. Del gineceo, se puede observar el
número de carpelos y de cavidades en el ovario y la placentación de los óvulos.21 En
el esquema de la derecha se observa el diagrama floral de Lilium, típico de la
familia de las liliáceas. El diagrama muestra que las flores son hermafroditas (tienen
estambres y pistilo), actinomorfas (presentan
varios planos de simetría). Elperigonio está formado por 6 tépalos dispuestos
en dos verticilos trímeros (o sea, cada uno de ellos está formado por tres
piezas), se hallan separados entre sí y libres de las demás piezas florales (se
dice, entonces, dialitépalo). El androceo presenta
6 estambres dispuestos
en 2 verticilos también trímeros, los filamentos se hallan separados entre sí y libres
de las demás piezas florales. El androceo es diplostémono (es decir que el verticilo externo de
estambres es opuesto a los tépalos externos y el ciclo interno es opuesto a los
tépalos internos). El gineceo es
de ovario súpero y está formado por 3 carpelos connados,
es trilocular. Los óvulos presentan placentación axilar.
En el esquema de abajo se puede observar el diagrama floral de una oxalidácea: Oxalis. Nuevamente, se
aprecia que la flor es hermafrodita y actinomorfa, pentacíclica (o sea,
presenta 5 verticilos florales) y pentámera (cada ciclo está compuesto por
cinco piezas).
La fórmula floral es
un modo de representar simbólicamente la estructura de una flor mediante el uso
de letras, números y otros signos. Típicamente, se utiliza la fórmula floral
para representar las características morfológicas de las flores de una
determinada familia de plantas, más que de una especie en particular. Las
siguientes son los símbolos más utilizados:
K = cáliz; por ejemplo, «K5» indica que
la flor tiene 5 sépalos.
C = corola; por ejemplo, «C3» significa que la flor presenta 3 pétalos.
Z = se agrega si la corola es cigomorfa; ejemplo, «CZ»6 = indica una corola cigomorfa con 6 pétalos
A = androceo; por ejemplo, «A∞» significa que presenta muchos estambres
G = gineceo; así, «G(3)1∞» indica un gineceo de ovario súpero (por eso la "G" está subrayada), compuesto por 3 carpelos unidos entre sí (por eso el número tres se pone entre paréntesis), con un solo lóculo y numerosos óvulos por lóculo. La cantidad de lóculos del ovario se indica como subíndice del número de carpelos; el número de óvulos por lóculo se indica como exponente.
C = corola; por ejemplo, «C3» significa que la flor presenta 3 pétalos.
Z = se agrega si la corola es cigomorfa; ejemplo, «CZ»6 = indica una corola cigomorfa con 6 pétalos
A = androceo; por ejemplo, «A∞» significa que presenta muchos estambres
G = gineceo; así, «G(3)1∞» indica un gineceo de ovario súpero (por eso la "G" está subrayada), compuesto por 3 carpelos unidos entre sí (por eso el número tres se pone entre paréntesis), con un solo lóculo y numerosos óvulos por lóculo. La cantidad de lóculos del ovario se indica como subíndice del número de carpelos; el número de óvulos por lóculo se indica como exponente.
Una fórmula floral,
entonces, adquiere una forma como la siguiente, típica de la familia de las
liliáceas:
K3 C3 A6 G(3)3∞
La cual indica
que las flores de esta familia presentan 3 sépalos, 3 pétalos, un androceo con
6 estambres y un gineceo de ovario súpero formado por 3 carpelos unidos entre
sí, con tres lóculos y numerosos óvulos por lóculo. La fórmula floral que
describe simbólicamente la estructura floral de Oxalis,
previamente descripta, es:
K5 C5
A10 G(5)5∞
Analogías y homologías
Las brácteas de color rojo
que rodean a las inflorescencias de Euphorbia pulcherrima adoptaron la
función de atracción que usualmente presentan los pétalos.
Durante la
diversificación de las angiospermas, diferentes linajes evolucionaron de modo
tal de utilizar el mismo patrón morfológico básico de modos diferentes. Por
ejemplo, en la "estrella federal" (Euphorbia pulcherrima) las brácteas que
rodean a las flores lograron un color rojo brillante y comenzaron a funcionar como
órganos de atracción para los polinizadores. Los "pétalos" de la
"estrella federal", entonces, no son en realidad pétalos sino órganos homólogos a las brácteas de las restantes fanerógamas, lo que significa que ambos
evolucionaron a partir de la misma estructura en un ancestro común. Desde el
punto de vista funcional, las brácteas de la estrella federal parecen y
funcionan como los pétalos de cualquier otra planta, lo que indica que ambas
estructuras son análogas o similares debido a una evolución convergente.
Los pétalos reales de la "estrella federal" se perdieron durante su
evolución ya que, de hecho, sus flores, diminutas y casi imperceptibles, no
presentan corola.
Las costáceas ofrecen otro ejemplo. Dos de los
estambres de las flores de esta familia son bastante inusuales, ya que durante
la evolución, los mismos han perdido su función original (son estériles), se
han fusionado y formaron una estructura muy llamativa denominada labelo. Este
labelo eshomólogo a los estambres y análogo a los pétalos de los restantes linajes
de angiospermas.
Inflorescencias
No
es una flor, sino una inflorescencia, formada en este caso por un círculo de
flores blancas rodeando a un contingente de flores amarillas.
Las flores
pueden aparecer solitarias o en parejas, pero lo más común es que crezcan
juntas en grupos organizados que se llaman inflorescencias. En ocasiones las flores aparecen
tan apretadas y ordenadas que toda la inflorescencia puede confundirse con una
flor, en cuyo caso podemos referirnos a ella como un pseudanto (falsa flor). El caso más notable lo
ofrecen las plantas de la familia de la margarita o el girasol (compuestas), cuya inflorescencia, denominada capítulo está integrada por decenas o cientos
de flores
Los órganos
constitutivos de las inflorescencias plurifloras son las flores provistas o no
del pedicelo, el eje o receptáculo común, el pedúnculo y
lasbrácteas. El pedicelo es la parte del tallo que
sostiene la flor; a veces es muy corto, y otras veces es nulo, en cuyo caso la
flor se dice sentada o sésil. El eje o raquis es la parte alargada del tallo que
lleva las ramas floríferas; si es corto y está ensanchado en forma de plato se
llama receptáculo común. El pedúnculo, es la parte del tallo que soporta el
raquis o el receptáculo común. El eje que sale de la base arrosetada de la
planta o de un órgano subterráneo se llama escapo (como por ejemplo en Amaryllis, Agapanthus y Taraxacum).
Las brácteas o hipsófilos son las hojas modificadas,
generalmente de menor tamaño que las hojas normales, coloreadas o verdosas, que
nacen sobre el raquis o acompañan a las flores. Algunas veces faltan, como en
el caso de las crucíferas, otras veces reciben nombres
especiales, tales comoglumas y glumelas en las gramíneas y ciperáceas, o espata en las aráceas y palmeras. En otros casos las brácteas forman
órganos protectores de las flores (involucros), como la cúpula de los robles (Quercus)
y el erizo del castaño. El prófilo o bracteola es la primera bráctea de una rama
axilar, está dispuesta del lado opuesto a la hoja normal. En las monocotiledóneas es bicarenada y por el dorso, cóncavo,
se adosa el eje que lleva la rama. En las espiguillas de las poáceas el prófilo recibe el nombre de pálea o glumela
superior.
Polinización
Las
flores de muchas especies deangiospermas están
evolutivamente diseñadas para atraer y recompensar a una o pocas especies
polinizadoras (insectos, aves, mamíferos). Su gran diversidad en cuanto a
forma, color, fragancia y presencia de néctar es, en muchos casos, el resultado
de la coevolución con cada especie
de polinizador.
Atracción de los
polinizadores
La zoofilia que caracteriza a muchas angiospermas
presupone que los animales polinizadores visiten las flores de manera regular y
se detengan en ellas el tiempo suficiente; que las anteras y el estigma sean rozados o tocados con cierta
frecuencia y que el polen quede adherido a los visitantes de
modo tan perfecto que pueda llegar con la debida seguridad a los estigmas de
otras flores. El resultado de la zoofilia depende esencialmente de que los
animales puedan reconocer las flores desde una cierta distancia y de que se
vean compelidos a visitar durante un cierto tiempo las flores de la misma
especie. Las flores zoófilas, entonces, deben poseer productos
atractivos (cebos, como el
polen y el néctar), medios
de reclamo (tales como
olores y colores) y, además, polen viscoso o adherente. En el
curso de la evolución de las angiospermas se ha producido una diferenciación
muy intensa de los medios de atracción y reclamo, así como de la forma de la
flor; gracias a ello un número cada vez más grande de animales ha podido colaborar
en la polinización. De la visita casual de las flores por animales variados se
ha pasado de modo progresivo, en el transcurso de la evolución, al
establecimiento de estrechas relaciones entre los «animales antófilos» y las
«flores zoófilas», con evidentes ventajas para ambos grupos. Para las plantas
implicó una precisión creciente en la atracción de solo determinados visitantes
y una transferencia del polen a los estigmas de otras plantas cada vez más
segura, lo que resultó en un ahorro progresivo en la producción de polen. De
hecho, la relación entre el número de granos de polen y el número de óvulos
producidos por una flor es del orden de un millón para las plantas anemófilas, mientras que en las orquídeas es de
uno. Para los animales polinizadores especializados, la competencia con otros
animales antófilos resultó disminuida y la polinización orientada o
especializada en una sola especie pasó a ser, en última instancia, ventajosa
para ellos. El desarrollo
evolutivo de las angiospermas zoófilas y de los grupos de animales que se han
ido adaptando a ellas sólo puede comprenderse como una coevolución condicionada por relaciones
recíprocas. La adaptación entre sí de muchas plantas y sus polinizadores ha
llegado a veces tan lejos que no pueden existir el uno sin el otro.
Productos atractivos
Son los cebos
que utilizan las flores como recompensa al agente polinizador. Básicamente se
trata de alimentos, como polen y néctar; o sustancias químicas que los insectos
utilizarán en sus rituales de apareamiento. El polen es una recompensa generalmente
en aquellas flores polinizadas por coleópteros e
himenópteros, atraídas por el fuerte aroma que despide. El polen contiene
proteínas, almidón, aceites y otros nutrientes. El néctar es un líquido
azucarado producido por estructuras llamadas nectarios. Se ubican estratégicamente en la flor
para que los insectos al tomarlo toquen los estambres y se lleven el polen de
una flor a otra.
Medios de reclamo y síndromes
florales
Los medios de
reclamo indican la presencia de la recompensa y pueden ser visuales u
olfativas. Generalmente esta función la ejercen el cáliz y la corola. Las
claves visuales están determinadas básicamente por el color de los pétalos, los
de color rojo en general atraen aves, los amarillos a las abejas y los blancos
a las mariposas nocturnas. Las claves olfativas son utilizadas para atraer a
los polinizadores desde una distancia mayor. Se trata de las fragancias que
despiden las flores gracias a compuestos volátiles excretados por estructuras
llamadas osmóforos. Estas fragancias pueden
ser agradables o desagradables para los seres humanos, como por ejemplo las que
atraen a las moscas. La forma de la flor también debe estar adaptada a cada
tipo de polinizador, evitando al mismo tiempo a los ladrones de néctar.
Aquellas flores polinizadas por escarabajos, por ejemplo, deben tener una
constitución que soporte el peso del insecto y proteja los óvulos de la
voracidad de los mismos. Para los colibríes e insectos que polinizan durante el
vuelo, las flores deben tener corolas tubulosas, adecuadas a los picos de los
pájaros y a lasespiritrompas de las mariposas. Para las abejas, las
flores son amplias y planas, brindando "pistas de aterrizaje" para el
insecto.
EL FRUTO
En
botánica, el fruto es el órgano procedente de la flor, o de partes de ella, que
contiene a las semillas hasta que estas maduran y luego contribuye a
diseminarlas. Desde un punto de vista ontogenético, el fruto es el ovario
desarrollado y maduro de las plantas con flor. La pared del ovario se engrosa
al transformarse en la pared del fruto y se denomina pericarpio, cuya función
es proteger a las semillas. Con frecuencia participan también en la formación
del fruto otras partes de la flor además del ovario, como por ejemplo el cáliz
o el receptáculo.
El
fruto es otra de las adaptaciones, conjuntamente con las flores, que ha
contribuido al éxito evolutivo de las angiospermas. Así como las flores atraen
insectos para que transporten polen, también muchos frutos tratan de atraer
animales para que dispersen sus semillas. Si un animal come un fruto, muchas de
las semillas que éste contiene recorren el tracto digestivo del animal sin
sufrir daño, para después caer en un lugar idóneo para su germinación. Sin
embargo, no todos los frutos dependen de ser comestibles para dispersarse.
Otros, como los abrojos, se dispersan aferrándose al pelaje de los animales.
Algunos forman estructuras aladas para poder dispersarse con el viento, como
los arces. La variedad de tipos de frutos que han desarrollado las angiospermas
a través de su evolución les ha permitido invadir y conquistar todos los
hábitats terrestres posibles.
En
las plantas gimnospermas y en las plantas sin flores no hay verdaderos frutos,
si bien a ciertas estructuras reproductivas como los conos de los pinos,
comúnmente se les tome por frutos.
Muchas
plantas se cultivan porque dan ciertos frutos comestibles y a menudo fragantes,
sabrosos y jugosos llamados frutas.

Forma y tamaño
Los frutos pueden
acusar muy diversas formas según las especies: los hay globosos, piriformes,
cilíndricos, espiralados, moniliformes, lenticulares, alados, entre otras
muchas . En general cada especie se caracteriza por la forma particular de sus
frutos. La superficie de los mismos puede ser lisa, verrugosa, espinosa,
gloquidiada, pruinosa, pubescente, etc.
Respecto al tamaño
de los frutos, es otro aspecto sumamente variable: los hay menores de un
milímetro, como en el caso de diversas gramíneas y compuestas, hasta muy grandes, como es el caso del zapallo, la sandía y
algunas leguminosas —como Vigna sesquipedalis— cuyos frutos alcanzan más de un
metro de longitud.
Pared del fruto
En
sentido estricto, el pericarpo es la pared del ovario que queda tras la fecundación;
en sentido amplio puede abarcar también los tejidos extracarpelares asociados.
Para salvar esa diferencia Katherine Esau acuñó la expresión «pared del fruto».
Con
sentido descriptivo, y sin relación con la ontogenia, la pared del fruto
comprende tres capas: exocarpo, mesocarpo y endocarpo.
El
exocarpo o epicarpo es la parte externa del fruto; corresponde a la cara
abaxial del carpelo y comprende la epidermis solamente, o la epidermis y los
tejidos subyacentes. La superficie del exocarpo puede tener aspectos muy
distintos. Puede ser lisa como en el morrón o pimiento (Capsicum annuum) o la
cereza (Prunus avium); pruinosa (con ceras) como en la uva (Vitis vinifera) y
la ciruela (Prunus domestica) o pubescente como en el durazno (Prunus persica).
En los frutos con dispersión zoocora se pueden desarrollar pelos ganchudos o
una cubierta pegajosa, como los pelos o espinas con forma de gancho de
Desmodium y Melilotus y las espinas del «chamico» (Datura ferox).
El
mesocarpo es la parte media y corresponde al parénquima del mesófilo del
carpelo. Puede ser delgado y seco como en el caso del maíz (Zea mays), o
abundante y carnoso como en el durazno o la berenjena (Solanum melongena). En
este último caso, el gran desarrollo que alcanza el mesocarpo se debe a la multiplicación
de las células parenquimáticas del mesófilo del carpelo. La clorofila, los
ácidos orgánicos (ácido málico, oxálico, cítrico) y otras sustancias —como los
taninos— que son abundantes al inicio del desarrollo del fruto, van siendo
paulatinamente reemplazadas por azúcares (glucosa, levulosa), antocianinas,
vitaminas, esencias y, en ciertos casos, almidón. Tales cambios originan frutos
de colores vistosos y de sabores generalmente gratos.
El
endocarpo es la capa interna y corresponde a la superficie adaxial del carpelo.
Rodea directamente a las semillas, sirve a menudo para la protección de estas,
y en algunos casos puede ser muy dura y de consistencia pétrea formando el
llamado hueso (pireno) en los frutos de tipo drupa. También puede ser carnoso como
en la uva, apergaminado como en las vainas de las arvejas (Pisum), pétreo como
en la aceituna (Olea europaea) o con pelos jugosos como en los frutos cítricos.
En algunas especies, tales como los algarrobos (Prosopis), las células del
endocarpo producen una pulpa suculenta que rodea las semillas.
La
consistencia de la pared del fruto permite categorizar a los frutos en dos
grupos básicos: los frutos secos y los carnosos. Los frutos secos son aquellos
cuyo pericarpo está formado a la madurez por células muertas y tiene un aspecto
más o menos seco. Pueden ser indehiscentes o dehiscentes, con una sola semilla
(unispermados) o con varias semillas. En el caso de los frutos indehiscentes
los tegumentos del óvulo en su mayor parte desaparecen o se funden con el
pericarpo. Los frutos carnosos, en cambio, se conservan suculentos hasta la
madurez debido al desarrollo de una o más capas del pericarpo o de estructuras
extracarpelares, y presentan células que se mantienen vivas. Son
filogenéticamente más nuevos. Pueden tener una cáscara (histológicamente
diferenciada) como es el caso de la naranja, o no tenerla, como en el tomate.
Reproducción
Vegetal
En botánica, la reproducción vegetal designa a los
variados mecanismos a través de los cuales las plantas se multiplican.
Los musgos, los hongos, los helechos y las plantas
superiores muestran una increíble diversidad de historias de vida, hábito de
crecimiento y fisiologías. No obstante, la diversidad de sus sistemas
reproductivos es al menos tan grande como las características mencionadas. En
todos estos vegetales coexisten tanto la reproducción sexual como la asexual.
La gran mayoría de los hongos producen esporas como medio para asegurar la
dispersión de cada especie y su supervivencia en condiciones ambientales
extremas. Así pues, las esporas son la unidad reproductiva y de dispersión de
los hongos y contienen toda la información genética necesaria para el
desarrollo de un nuevo individuo. Esas esporas pueden formarse tanto sexual
como asexualmente y en estructuras sumamente diversas. La reproducción sexual
de los hongos puede involucrar a un solo individuo o a dos de ellos. En este
último caso, ambos indivdiuos deben pertenecer a sexos o tipos de apareamiento
diferentes. En algunos grupos de hongos solo hay dos tipos de apareamiento, en
otros existen miles. En algunos helechos, los gametofitos haploides
individuales producen tanto óvulos como espermatozoides. En otros, los
gametofitos individuales producen sólo un tipo de gameto. En las plantas con
semilla, las estructuras productoras de polen y de óvulos pueden crecer juntas
dentro de una misma flor, desarrollarse por separado en diferentes flores de la
misma planta o bien, ser producidas en plantas completamente diferentes. En
ambos grupos de plantas, peridofitas y plantas con semillas, estos patrones
diferentes de distribución de las estructuras que forman los gametos femeninos
y masculinos influye sobre la frecuencia con la que los gametos de individuos
no relacionados se unen en cigotos. A su vez, este proceso influencia la
cantidad y distribución de la diversidad genética que se encuentra en las
poblaciones de una especie.
La gran mayoría de los hongos producen esporas como
medio para asegurar la dispersión de la especie y su supervivencia en
condiciones ambientales extremas. Así pues, las esporas son la unidad
reproductiva y de dispersión de los hongos y contienen toda la información
genética necesaria para el desarrollo de un nuevo individuo. En los hongos hay
dos formas de reproducción: sexual y asexual, aunque en algunas especies
coexisten ambas formas en el mismo organismo («holomorfo»), denominándose
estado perfecto o «teleomorfo »a la forma sexual y estado imperfecto o
«anamorfo »a la asexual. Así, los hongos que presentan reproducción sexual se
denominan hongos perfectos y los que sólo tienen, o sólo se les conoce,
reproducción asexual se denominan hongos imperfectos.
Reproducción
sexual
Las esporas sexuales de los hongos son más
resistentes al calor que las asexuales, suelen presentar latencia, germinando
sólo cuando son activadas, por ejemplo por calor suave o alguna sustancia
química. En la formación de las esporas sexuales intervienen una gran variedad
de estructuras y, además, la reproducción sexual difiere notablemente entre los
diversos grupos de hongos. Así, en los zigomicetes es por medio de unas hifas
especializadas llamadas gametangios, en los ascomicetes se producen a través de
unas células con aspecto de saco denominadas asco y en los basidiomicetes
intervienen células especializadas denominadas basidios.
En líneas generales dos núcleos haploides de dos
células o gametos se unen formando una célula diploide que por meiosis da lugar
a cuatro núcleos haploides. En este proceso suele haber recombinación genética.
Si los hongos poseen en el mismo micelio núcleos complementarios capaces de
conjugarse se llaman hongos «homotálicos » y si necesitan núcleos procedentes
de micelios diferentes se llaman hongos «heterotálicos».
En los ascomicetes, normalmente las ascas contienen
ocho ascosporas, producidas por una división celular meiótica seguida, en la
mayoría de las especies, por una mitosis. Sin embargo, en algunos géneros o
especies pueden contener una (por ejemplo, en Monosporascus cannonballus), dos,
cuatro, u otro número múltiplo de cuatro. En algunos casos, las ascosporas
pueden producir conidios, que pueden llenar por cientos las ascas (como en el
género Tympanis), o pueden fragmentarse (como en algunos Cordyceps), llenando
también las ascas de células más pequeñas. Las ascosporas son inmóviles y, por
lo general, unicelulares, aunque no pocas veces pueden presentarseseptadas en
uno o varios planos.
Usualmente, el micelio haploide de los
basidiomicetes se fusiona a través de plasmogamia y luego los núcleos
compatibles migran hacia el micelio del otro individuo de modo tal que se forma
un dicarionte o micelio dicariótico, es decir un micelio que presenta dos
núcleos diferentes. Por el contrario, el micelio que presenta un solo núcleo
haploide se denomina monocarionte. La fusión de los dos núcleos en el dicarionte
puede tardar desde semanas hasta años. Estacional u ocasionalmente los
dicariontes producen basidios, células especializadas en las que los núcleos
haploides compatibles se fusionan para formar núcleos diploides.
Inmediatamente, estos núcleos sufren meiosis para producir cuatro núcleos
haploides que migran cada uno hacia su propia basidiospora externa. En la
mayoría de los basidiomicetes, estas esporas luego se dispersan para formar
nuevos micelios haploides.
Tipos
de apareamiento
Los tipos de apareamiento son mecanismos que regulan
la compatibilidad en los cruzamientos entre los hongos que se reproducen
sexualmente. Debido a que los gametos en estos organismos no difieren en su
tamaño, no se refieren como pertenecientes a sexos diferentes. Así, en vez de
femenino o masculino, los tipos de apareamiento se designan con números, letras
o simplemente con los signos "+" y "-". La fusión entre
gametos o singamia solo puede ocurrir entre los que presenten diferente tipo de
apareamiento. Los ascomicete en general presentan sólo dos tipos de
apareamiento. Los basidiomicetes, en cambio, pueden tener miles de tipos de
apareamiento distintos.

Artificial
Acodo:
Es un procedimiento por el cual se forman nuevos ejemplares partiendo de una
rama de una planta madre, separándola recién al final del proceso, cuando al
nuevo ejemplar ya le han brotado raíces.
Estaca:
fragmentos de rama, unos herbáceos y los otros leñosos, conteniendo alguna
yema.
Injerto:
de púa, yema o aproximación: porciones de rama con una o más yemas que
aplicadas sobre un patrón se sueldan con él y desarrollan el ramaje de la nueva
planta.
Esqueje.
Técnicas
de micropropagación: mediante pequeños fragmentos de la planta madre o
embriones cultivados en tubos de ensayo, con solución nutritiva y ambiente
aséptico.
Cultivo
de tejidos vegetales.
Natural
Mediante
las mitosporas; forma típica en hongos, musgos, helechos y líquenes
Mediante
propágulos:
Rizoma
Tubérculo
Bulbo
Estolón
Cormo
Mediante semillas
Apomixis
Las
plantas que presentan este tipo de reproducción (las que se denominan plantas
apomícticas) producen sus semillas sin que ocurra meiosis ni fertilización, por
lo que sus descendientes son genéticamente idénticos a la planta madre. Aunque
desde el punto de vista evolutivo las plantas apomícticas carecen de las
ventajas adaptativas que ofrece la reproducción sexual, la apomixis permite la
fijación indefinida de genotipos altamente adaptados a su ambiente. Esta
ventaja de la apomixis es -desde el punto de vista genético- la misma que
presenta la multiplicación vegetativa. No obstante, en el caso de las plantas
apomícticas los descendientes no permanecen en las inmediaciones de la planta
madre, compitiendo con ella por recursos, sino que gracias a la dispersión de
las semillas los nuevos individuos pueden explorar y conquistar nuevos
ambientes. La apomixis se halla ampliamente distribuida en ciertas familias de
plantas, tales como las poáceas, las rosáceas y las compuestas. En estas
últimas la apomixis es un tipo de reproducción obligada en muchas especies,
mientras que en las otras dos familias la apomixis y la reproducción sexual
pueden tener lugar, lado a lado, en el mismo individuo (apomixis facultativa).
La
apomixis elude la ruta sexual evitando la reducción meiótica y la fecundación.
El óvulo desarrolla una semilla cuyo embrión contiene exactamente el mismo
genotipo que la planta que lo origina. Los embriones apomícticos pueden
formarse a través de una ruta esporofítica o gametofítica. En la primera,
también llamada embrionía adventicia, los embriones surgen directamente de una
célula somática de la nucela o de los tegumentos del óvulo. Esta forma de
apomixis aparece comúnmente en los cítricos, los cuales se convirtieron en un
sistema modelo para estudiar el proceso. En la apomixis gametofítica se forman
siempre sacos embrionarios que difieren en algunos aspectos del gametófito
femenino haploide (n) generado a partir de la megáspora funcional. Su principal
diferencia es precisamente el hecho de ser diploides (2n) ya que los núcleos que
los conforman no han pasado por el proceso meiótico y por lo tanto no han
reducido su número cromosómico. Por eso se dice que estos sacos embrionarios
surgen por un proceso de apomeiosis ("sin meiosis"). De acuerdo con
el origen de la célula que genera al saco embrionario y al embrión, la apomixis
gametofítica puede ser clasificada como: diplosporía, cuando el saco
embrionario se origina a partir de la célula madre de la megáspora misma ya sea
por mitosis o luego de una falla en la meiosis o aposporía, cuando el saco
embrionario se origina directamente por mitosis a partir de una célula
somática, usualmente una célula de la nucela.
Los
sacos embrionarios, sean éstos apospóricos o diplospóricos, contienen un gameto
femenino diploide (2n), la ovocélula, a partir de la cual se desarrolla
directamente el embrión por partenogénesis sin que exista fecundación. Así,
mientras en el proceso sexual la reducción meiótica se complementa con la
fecundación que restaura el nivel de ploidía 2n, en la apomixis gametofítica la
ausencia de reducción se complementa con la partenogénesis.28 En la apomixis
gametofítica la partenogénesis excluye uno de los procesos de la doble
fecundación: la unión de los gametos masculinos con los femeninos. Sin embargo
no necesariamente se anula la fecundación de los núcleos polares. Aunque en
algunos casos el endosperma puede desarrollarse en forma autónoma (sin la unión
de un gameto masculino con los núcleos polares del saco embrionario apospórico
o diplospórico) en muchas especies apomícticas, como ocurre en la mayoría de
las gramíneas tropicales, es necesario que un gameto masculino se fusione con
el o los núcleos polares de la célula central del saco embrionario para formar
el endospermo. A este proceso se lo llama pseudogamia.
Por
lo expuesto, existen tres tipos diferentes de mecanismos de apomixis:
Diplosporia:
la célula madre del saco embrionario o gametófito femenino se desarrolla
directamente en un embrión, proceso conocido con el nombre de partenogénesis
diploide. El embrión es diploide.
Aposporia:
el saco embrionario tiene su origen en una célula somática de las múltiples que
rodean la célula madre del saco embrionario (nucela). El embrión es diploide.
En
ambos casos se desarrolla un gametofito pero la meiosis no existe o, en el caso
de que se produzca, no tiene consecuencias observables. Por esta razón se llama
también a este fenómeno apomixis gametofítica.
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LA FLUORESCENCIA
Las tonalidades
violáceas y amarillentas que exhiben ciertas flores se deben a la presencia de
betalaínas, un grupo de pigmentos vegetales que contienen nitrógeno y son
solubles en agua. Se acumulan en flores, frutas y, de forma ocasional, en el
tejido vegetativo de plantas de la mayoría de las familias del orden de las
Cariofilales. También se hallan presentes en hongos como Amanita e Hygrocybe.
Hasta el momento se han identificado en la naturaleza más de 50 betalaínas,
cifra que aumenta constantemente.
Se dividen en dos
grupos: las betacianinas, de color violeta, y las betaxantinas, de color
amarillo. El ácido betalámico, la unidad estructural básica de estos pigmentos,
se encuentra condensado con un aminoácido o amina, en las betaxantinas, y
conjugado con ciclo-dihidroxifenilalanina (ciclo-DOPA) en las betacianinas.
Esta molécula puede incorporar azúcares y ácidos a través de uno de los dos
grupos hidroxilo presentes en el anillo aromático, con lo que origina dos
familias de compuestos: los derivados de la betanina
(betanidina-5-O-beta-glucósido) o de la gomfrenina I
(betanidina-6-O-beta-glucósido).

En botánica, la
inflorescencia es la disposición de las flores sobre las ramas o la extremidad
del tallo; su límite está determinado por una hoja normal. La inflorescencia
puede presentar una sola flor, como en el caso de la magnolia o el tulipán, o
constar de dos o más flores como en el gladiolo y el trigo. En el primer caso
se denominan inflorescencias unifloras y en el segundo se las llama
plurifloras.
Las inflorescencias
unifloras pueden ser terminales como en la magnolia, o axilares como en la
camelia, y constan generalmente del pedicelo y algunas brácteas.
Los órganos
constitutivos de las inflorescencias plurifloras son las flores provistas o no
del pedicelo, el eje o receptáculo común, el pedúnculo y las brácteas. El
pedicelo es la parte del tallo que sostiene la flor; a veces es muy corto, y
otras veces es nulo, en cuyo caso la flor se dice sentada o sésil. El eje o
raquis es la parte alargada del tallo que lleva las ramas floríferas; si es
corto y está ensanchado en forma de plato se llama receptáculo común.
El pedúnculo, es la
parte del tallo que soporta el raquis o el receptáculo común. El eje que sale
de la base arrosetada de la planta o de un órgano subterráneo se llama escapo
(ejemplo, Amaryllis, Agapanthus, Taraxacum).
Las brácteas o
hipsófilos son las hojas modificadas, generalmente menores que las hojas
normales, coloreadas o verdosas, que nacen sobre el ráquis o acompaña a las
flores. Algunas veces faltan, como en el caso de las Crucíferas, otras veces
reciben nombres especiales, tales como glumas y glumelas en las Poáceas y
Ciperáceas, o espata en las Aráceas y Palmeras. En otros casos las brácteas
forman órganos protectores de las flores (involucros), como la cúpula de
Quercus y el erizo del castaño.
El prófilo o bracteola
es la primera bráctea de una rama axilar, está dispuesta del lado opuesto a la
hoja normal. En las Monocotiledóneas es bicarenada y por el dorso, cóncavo, se
adosa el eje que lleva la rama. En las espiguillas de las Poáceas el prófilo
recibe el nombre de pálea o glumela superior.
Las inflorescencias
plurifloras pueden ser simples, si solo constan de un eje o receptáculo común
que lleva las ramitas unifloras, o compuestas cuando el eje principal lleva
ramas plurifloras laterales.
De acuerdo con la
forma y desarrollo del eje se distinguen dos tipos diferentes de
inflorescencias: las racimosas, cuyo crecimiento es indefinido, y las cimosas,
de crecimiento definido.
En ambos casos
pueden estar formadas por inflorescencias elementales de igual naturaleza que
la inflorescencia total (ejemplo, racimo de racimos o espiga de espigas) y se
las denomina inflorescencias homogéneas. Por el contrario, pueden estar
formadas de elementos de distinta naturaleza, sea del mismo tipo (ejemplo,
racimo de espigas) o de distinto tipo (ejemplo, cima de capítulos). En el
primer caso se las denomina inflorecencias heterogéneas y, en el segundo,
inflorescencias mixtas. En los casos en que la inflorescencia pluriflora simula
una sola flor, tal como el capítulo de las Compuestas (Asteraceae), el espádice de las Aráceas o
el ciatio de Euphorbia, se le denominapseudanto.
Inflorescencias abiertas o
racimosas
Las inflorescencias
se denominan abiertas,
racimosas o racemosas cuando los meristemas apicales
de los diversos ejes mantienen su actividad mientras dura el crecimiento de
éstas. En este tipo de inflorescencias todas las flores son laterales. El eje o
raquis de la inflorescencia crece indefinidamente mientras a los costados se
producen yemas florales que se abren a medida que aquel se desarrolla. Los
botones apicales, o los del centro de la inflorescencia, son los últimos en
abrirse. La marcha de la floración es centrípeta. En este tipo de
inflorescencias se distinguen cuatro clases diferentes que ofrecen una notable
diversidad de formas: el racimo,
la espiga,
la umbela y el capítulo.
Inflorescencias cerradas o
cimosas
Las
inflorescencias se denominan cerradas o cimosas cuando los meristemas
apicales de los diversos ejes se consumen en la producción de flores. Por
debajo de la yema terminal convertida en flor, otras yemas laterales producen
nuevos ejes. En este tipo de inflorescencias todas las flores son terminales.
En las inflorescencias cimosas la flor terminal del eje principal es la primera
en abrirse, seguida de las flores terminales de lo ejes de segundo orden,
tercer orden, etc.
Por su aspecto
general recuerdan inflorescencias racimosas pero el desarrollo de la floración
es diferente, pues comienza por la flor central y termina en las laterales,
siguiendo una marcha centrífuga.
Es común, además,
que la bráctea aparezca del lado contrario a la rama florífera; esto se debe a
que cada eje que va naciendo remata en una flor y cesa de crecer, comenzando el
crecimiento de otra rama en la axila formada por la hoja y la ramita floral. El
número de ramas floríferas que se desarrolla debajo de la primera flor, o donde
se ha interrumpido el crecimiento vegetativo es variable entre una o más. En el
caso de ser única, la inflorescencia se llama monocasio (ejemplo Iris), si son dos dicasio (ejemplo Cariofiláceas), si son tres o más se denomina pleiocasio (ejemplo Geranium). Las inflorescencias cimosas comprenden muchas clases, cuyas
principales son la cima helicoidal, la cima circinada, la cima dicotómica, la cima
umbeliforme, la cima
corimbiforme y la cima
capituliforme.

¿QUÈ
ES TALLO?
Es la parte de la
planta que tiene como funciones servir de sostén a las hojas, flores y frutos y
conducir la savia a través de sus vasos. Crece en sentido inverso al de la
raíz. Es exclusivo de las plantas que tienen un tronco con tejidos
diferenciados para cumplir diferentes funciones.

ORIGEN:
El tallo se origina de
la gémula del embrión y su tamaño es variado según la planta.
PARTES:
De nudos, internodios y
yemas.
Los nudos son
abultamientos que de trecho en trecho se observan en el tallo. En ellos se
insertan las hojas y las ramas.
Internodios:
Son los espacios, más o
menos largos, comprendidos entre dos nudos consecutivos. La longitud de los
internodios disminuye a medida que se aproximan al ápice del tallo.
En algunos vegetales,
el tallo no se ramifica, y en otros los hace en diversas formas, originando las
ramas o tallos secundarios, que a su vez pueden ramificarse. Algunas veces las
ramificaciones, se convierten en espinas. El tallo se une con la raíz a nivel
de la zona de transición llamada cuello.
Yemas
y ramificaciones:
El origen de las ramas
de un tallo son las yemas. Pequeños cuerpos ovoideos que se observan en las
axilas de las hojas, o las yemas adventicias que pueden desarrollarse en
cualquier lugar del tallo. La ramificación del tallo puede ser lateral o
terminal.
Lateral: el tallo
tiene yemas laterales independientes de la yema terminal, que origina nuevas
ramas laterales que siguen creciendo. Las ramas más viejas situadas en la parte
inferior de la planta son más largas que las ramas más jóvenes situadas cerca
de la cima. Dando a la planta un aspecto de copa.
Terminal: es
la que permite el crecimiento vertical de la planta. Los tallos que no tienen
yemas laterales no originan ramificación lateral como en las palmeras.
DIFERENTES
CLASES DE TALLOS
Los tallos se
clasifican según su consistencia, duración, medio en que viven, posición, etc.
Según
su consistencia.-pueden se leñosos, como en el paraíso,
roble, olivo, rosal, semileñosos, como en la hortensia y el ombú (que no es un
árbol sino una gigantesca hierba) o en la rosa de China; o herbáceos, como en
el trigo, maíz, lechuga, pensamiento, etc.
Por
su duración.- los tallos se clasifican en anuales,
propios de las plantas que viven un año: lino, cebada, dalia, etc.; bianuales,
tallos de dos años, como en la remolacha, la col, etc., y perennes, propios de
los árboles.
Por
el medio en que viven.- pueden ser aéreos, subterráneos y acuáticos.
TALLOS
AÉREOS:
Los tallos aéreos se
dividen a su vez, en tallo propiamente dicho, tronco, caña y estípite.
Tallo
propiamente dicho: es el tallo de consistencia herbácea
propio de las hierbas: lechuga, orégano, clavel.
Tronco:
es el tallo leñoso, cilíndrico de los árboles y arbustos: espinillo, jacarandá,
naranjo.
Caña: es
el tallo herbáceo, leñosos o semileñosos, cilíndrico, formado por internodios y
nudos muy pronunciados. De éstos nacen las hojas envainadoras. Pueden ser huecos,
como en el trigo.
Estípite: es
un tallo cilíndrico que termina en un penacho de hojas, y tiene una sola
terminal muy grande como las palmeras.
TALLOS
SUBTERRÁNEOS:
Los tallos subterráneos
se clasifican en rizomas, tubérculos y bulbos.
Confundidos a veces con
raíces, debe hacerse notar que presentan yemas y, por lo tanto, son tallos.
Rizomas: horizontales,
en su cara superior tienen yemas que originan órganos aéreos, y en la inferior
raíces adventicias: lirio, achira. Almacenan sustancias de reserva.
Tubérculos: engrosados
por las sustancias de reserva que almacenan; poseen yemas que originan nuevas
plantas. La papa es un ejemplo típico.
Bulbos: compuestos
de un tallo duro y ensanchado que produce varias yemas por la parte superior, y
raíces adventicias por la inferior; el conjunto más o menos esférico está
recubierto por hojas generalmente en escamas, blancas o amarillentas que se
llaman hojas catáfilas, como el junquillo y la azucena.
TALLOS
ACUÁTICOS:
Pertenecen a las
plantas que viven en el agua, fijas, flotantes o sumergidas. En general son
verdes y algunos presentan espacios esponjosos llenos de aire que facilitan la
flotación, como el camalote y el irupé.
POSICIÓN
DE LOS TALLOS:
Erguido: el
tallo se eleva directamente del suelo.
Rastrero: el
tallo se arrastra por el suelo, emite brotes, llamados estolones, que producen
raíces adventicias que originan nuevas plantas como la frutilla.
Trepadores: son
los tallos de las plantas que trepan por las paredes o troncos de árboles,
gracias a recibe adventicias como la hiedra. La vid trepa por medio de sus
zarcillos leñosos, que se enroscan en espiral. La enamorada del muro se fija
por zarcillos adhesivos.
FUNCIONES
DEL TALLO
Las
funciones del tallo son: circulación de la savia, sostén de
las hojas, flores y frutos, conducir la savia a través de sus
vasos y almacenamiento en algunos casos de reservas alimenticias.

¿QUE
SON LAS HOJAS?
Las hojas son apéndices
caulinares, en general verdes y aplanadas, que nacen y se expanden lateralmente
en los nudos de los tallos y ramificaciones. Se desarrollan a partir de los
denominados primordios foliares que se forman gracias a la actividad del llamado
meristemo apical.
FUNCIONES DE LAS HOJAS
·
Las hojas son apéndices
caulinares de los tallos que tienen la función de realizar la-fotosíntesis
·
realizar la
fotosíntesis en los cloroplastos de las células; debido a lo cual, los
vegetales superiores son, junto a los otros organismos fotosintéticos, los
productores primarios en la biosfera.
·
Las hojas realizan el intercambio de gases
(fotosíntesis y respiración) a través de sus estomas aeríferos, por los que
además transpiran el vapor de agua(evapotranspiración).
·
A través de los estomas
de las hojas, la planta toma el dióxido de carbono, CO2, de la atmósfera, y
expulsa el O2 procedente de la fotólisis del H2O, proceso incluido en la
fotosíntesis. Este oxígeno es fundamental para la vida en nuestro planeta.
LAS
PARTES DE LA HOJA

Típicamente,
en la hoja se distinguen tres partes:
·
Limbo
·
Pecíolo
·
Vaina
El
limbo o lámina:
Es la parte
generalmente laminar plana, verde y ancha de la hoja; la cara superior se llama
haz y la inferior envés; el haz suele ser de color oscuro y el envés algo más
claro. La base del limbo se agranda a veces para albergar la yema, siempre
presente en la axila de la hoja (yema axilar).
El limbo está surcado
por una serie de líneas o cordones, perfectamente visibles al trasluz y
salientes por el envés, llamadas nerviaciones, nervaduras o nervios. Son
hacecillos de conductos vasculares prolongación y ramificación de los del
pecíolo, cuya misión es aportar la savia bruta y retirar la elaborada. En
muchas hojas el nervio principal es central y finaliza en la punta del limbo
(el ápice); del nervio principal suelen partir otros nervios secundarios.
Mediante las nervaduras del limbo se puede realizar clasificaciones de las
hojas (véase más abajo la clasificación de las hojas según su nervadura).
Pecíolo
o pedúnculo foliar:
Es el filamento, en
general delgado y de color verde, que une el limbo al tallo. Su haz suele ser
plano o cóncavo, mientras que su envés suele ser convexo. Sus tejidos
vasculares, que comunican la hoja con el tallo, permiten la llegada del agua y
los minerales absorbidos por la raíz. Tiene además la capacidad de orientar a
la hoja en la dirección de la luz solar.
La
vaina:
Es la terminación
ensanchada del pecíolo en el punto de unión con el tallo. Puede rodear al tallo
muy claramente, como es el caso de la vaina cilíndrica de las gramíneas, o no
existir. Algunas vainas llevan una prolongación membranosa en su parte superior
llamada lígula. En la base del pecíolo, en ciertas especies, suelen encontrarse
unas pequeñas laminillas o apéndices de distintos tipos, que pueden ser
glandulares, espinosas, foliáceas o escamiformes, que reciben el nombre de
estípulas. Las hojas sin pecíolo se llaman sentadas o sésiles.
CLASIFICACION
DE LAS HOJAS
La enorme variabilidad de las hojas permite clasificarlas en diversos tipos atendiendo a diferentes criterios:
·
Por su nervadura
·
Por el número y
disposición de los folíolos
·
Por su forma general
·
Por la forma del borde
·
Por la forma del limbo
·
Por la forma del ápice
·
Por la forma del margen
·
Por la forma de la base
Tipos de hojas según su nervadura
La nervadura o nerviación de las hojas varía dependiendo de las especies, aunque las más comunes son las de nervadura paralela o paralelinervias, en que las nervaduras se extienden paralelamente desde su base; y las de nervadura reticular, en las que existen nervios principales, de los que salen, a modo de red, otros nervios secundarios o menores en disposición de retículo.
De éstos tipos
generales de hojas también se pueden deducir otros, como las radiales,
penninervias, curvinervias.
Se
detallan los tipos comunes de hojas según su nervadura:
Paralelinervia: cuando
todos los nervios son paralelos y parten longitudinalmente del pecíolo a lo
largo de la hoja, como son las hojas de las monocotiledóneas.
Penninervia
o pinnatinervia: cuando hay un nervio central, y
todos los demás nacen a lo largo de su eje, como las barbas de la pluma de un
ave cuando parten del raquis (ejemplo de la hoja del avellano).
Palmatinervias: cuando
el pecíolo, en la unión con la hoja, se ramifica en nervios diferentes.
Curvinervia: cuando
varios nervios que parten del pecíolo no se extienden paralelamente, sino que
describen una curva más o menos suave a lo largo de toda la hoja hasta su
ápice, ejemplo de la hoja del llantén.
Palmeada: cuando
hay más de un nervio principal ramificado que sale del pecíolo, a modo de los
dedos de una mano.
Radial: cuando
los nervios salen desde un centro común en forma de radios, ejemplo de la hoja
de la hierba centella.
UNIVERSIDAD TÉCNICA DE MACHALA
FACULTAD DE CIENCIAS AGROPECUARIAS
CARRERA DE INGENIERÍA AGRONÓMICA
TEMA:
TRABAJO DE
INVESTIGACIÓN DEL CRECIMIENTO DE LA SOJA Y MAIZ
ALUMNO: Héctor
Encalada
CICLO: Primero
“A”
PROFESOR: ING. Ivan Villacres
|

Machala 2014 _ 2015
Introducción
Las nuevas variedades de cultivos mejorados no se convierten en un impulso
importante de la agricultura, sino hasta que las semillas de tales variedades
están disponibles para los agricultores, es genéticamente pura, es viable, no
contienen semillas de hierbas mezcladas y existen en cantidades suficientes en
el lugar y ocasión apropiada. El beneficio de la semilla en una parte integral
de la tecnología implicada en la transformación del mecanismo
genético seguido por el productor, en el mejoramiento y procesamiento de la
semilla. El procesamiento de semilla está afectado en gran medida por el tipo
de equipo y manejo que se disponga, así como su disposición dentro de la planta
y sus conocimientos sobre las características de las semillas.

Las semillas son procesadas para quitarle las impurezas, clasificarlas en
tamaño para la siembra, superar su calidad por medio de la separación de las semillas dañadas
o deterioradas y para aplicarles las sustancias del tratamiento sanitario.
Procesar semilla, incluye todos los pasos desde su preparación, una vez
cosechada, para el posterior almacenamiento, hasta su comercialización. Del manejo eficiente que se le dé a este proceso dependerá la calidad final de la semilla, siendo
ello la herramienta fundamental para el incremento de la producción de alimentos, a niveles satisfactorios.
La importancia estratégica de la producción de semillas de alta calidad en
el país, permite incrementar los rendimientos por unidad de superficie.
Revisión
Literaria
LA GERMINACIÓN DE LA SOJA
La primera hojita ve la luz (el cotiledón
emerge, VE).

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Primeras hojas unifoliadas (se llama estado VC por los estudiosos).
Las hojas que le siguen tienen 3 lóbulos (primer hoja trifoliada, estado V1).
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Cuatro hojas trifoliadas (el primer par de hojitas se llaman cotiledones, se caen al rato, el segundo par son unifoliadas y opuestas y las siguientes son trifoliadas y alternas, es el estado V4 de la escala de Fehr y Caviness).

Principio de floración: hay una flor abierta en cualquier nudo de la planta, las flores son pequeñas de color violeta (R1).

Plena floración: es cuando hay una flor abierta en alguno de los dos, nudos.

Principio de fructificación: se están formando los frutos (chauchas, vainas) que son muy pequeños en alguno de los dos nudos superiores (5mm, estado).

Plena fructificación: en alguno de los cuatro nudos superiores las chauchas tienen 2 cm de largo.
Principio de llenado: se entiende por esto al crecimiento de las semillas, en alguna de las cavidades de alguna chaucha ubicada en alguno de los cuatro nudos superiores hay una semilla de 2 mm de diámetro.

Pleno llenado: hay una semilla verde en alguno de los lóculos de alguna vaina ubicada en alguno de los cuatro nudos superiores.

Principio de madurez: alguna chaucha ubicada en el tallo principal ha alcanzado su color típico de madurez.

Plena
madurez: el 95% de las chauchas tienen el color típico de madurez.

LA GERMINACIÓN DE LA MAÍZ

Para la
normalización de las definiciones, los investigadores de maíz han elaborado una
guía para identificar las diferentes etapas de crecimiento del maíz. No todas
las plantas en el campo de llegan a una etapa en particular, al mismo tiempo.
Por lo tanto, los investigadores asumen que el cultivo alcanza una etapa
específica cuando al menos el 50% de las plantas presentan las características
correspondientes.
La normalización de
las definiciones permite que los investigadores se refieran a los problemas de
las etapas de crecimiento específicas. Los investigadores también pueden
comparar la fenología de maíz bajo diferentes condiciones ambientales y de
tratamientos experimentales.
Los investigadores
dividen las etapas de crecimiento en dos grandes categorías:
·
Vegetativa (V)
·
Reproductiva (R)
Además, las etapas
de crecimiento se pueden agrupar en cuatro grandes períodos (ver Tabla 2 para
más detalles):
·
Crecimiento de las plántulas (etapas VE y V1)
·
Crecimiento vegetativo (etapas V2, V3... Vn)
·
Floración y la fecundación (etapas VT, R0, y R1)
·
Llenado de grano y la madurez (etapas R2 a R6)
Tabla 2. Etapas de crecimiento
Etapa
|
DAS*
|
Características
|
VE
|
5
|
El coleoptilo emerge de la superficie del suelo
|
V1
|
9
|
Es visible el cuello de la primera hoja.
|
V2
|
12
|
Es visible el cuello de la segunda hoja.
|
Vn
|
|
Es visible el cuello de la hoja número “n”. (“n”
es igual al número definitivo de hojas que tiene la planta; “n” generalmente
fluctúa entre 16 y 22, pero para la floración se habrán perdido las 4 a 5
hojas de más abajo.)
|
VT
|
55
|
Es completamente visible la última rama de la
panícula.
|
R0
|
57
|
Antesis o floración masculina. El polen se
comienza a arrojar.
|
R1
|
59
|
Son visibles los estigmas.
|
R2
|
71
|
Etapa de ampolla. Los granos se llenan con un
líquido claro y se puede ver el embrión.
|
R3
|
80
|
Etapa lechosa. Los granos se llenan con un
líquido lechoso blanco.
|
R4
|
90
|
Etapa masosa. Los granos se llenan con una pasta
blanca. El embrión tiene aproximadamente la mitad del ancho del grano.
|
R5
|
102
|
Etapa dentada. La parte superior de los granos se
llena con almidón sólido y, cuando el genotipo es dentado, los granos
adquieren la forma dentada. En los tipos tanto cristalinos como dentados es
visible una “línea de leche” cuando se observa el grano desde el costado.
|
R6
|
112
|
Madurez fisiológica. Una capa negra es visible en
la base del grano.
La humedad del grano es generalmente de alrededor del 35%. |
* DAS: número aproximado de días después de la
siembra en tierras bajas tropicales, donde las temperaturas máxima y mínima
pueden ser de 33°C y 22°C, respectivamente. En los ambientes más fríos, se
amplían estos tiempos.
|

MATERIALES Y
METODOS
MATERIALES
Cosas Utilizadas:
v
4 botellas plásticas de 3 litros.
v
4 semillas de soja.
v
4 semillas de maíz.
v
Hojas de papel periódico.
v
Hoja de papel Bon.
v METODOS
Al tener
todos los materiales propuestos anteriormente lo primero que se hace es;
Primero antes de todo se pone en remojas las semillas de soya y frejol. Para
seguir con el proceso, se introduce la cartulina o papel al interior de los
lados de la botella en forma de tubo, luego se las rellena de papel periódico
para que puedan presionar las semillas, una vez ya hecho esto se introduce las
semillas a los lados del interior de la botella, sosteniéndose con la presión
de la cartulina, la semilla debe ser visible a los ojos de quien está haciendo
el experimento, para poder observar el crecimiento de las raíces y desarrollo
de las demás partes de la planta.
v Los materiales después de la siembra
Luego de la
siembra simplemente las semillas requieren todo el cuidado y amor para su mejor
desarrollo como: riego, verificar si no presentan algún cambio inadecuado a su
crecimiento, mantenerse al pendiente de ellas, ver si les falta agua, buen
ambiente. etc.
CRONOGRAMA DE ACTIVIDADES
Martes, 28 de
enero del 2014
Hoy se empezó
el trabajo de botánica, en el cual consiste en hacer un experimento con
semillas de maíz y soja.
Aproximadamente
a las 6:00 am se puso a remojar las semillas de maíz y soja en agua. Después de 24horas se hizo el
experimento en el cual se puso el papel bon en los costados de las botellas
recortadas y rellenar de papel periódico, luego poner las semillas en los
costados y tomar datos de desarrollo de germinación.




Miércoles, 29
de enero del 2014
Hoy se rego
un poco de agua, he logrado ver un diferente color de la semilla de soya y en
la de maíz y no hubo ningún brote.
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Jueves, 30 de enero del 2014
Hoy se observaban
a simple vista unos pequeñísimos bultos de la soya para su intermedia entre los
cotiledones y del maíz era en su parte de en medio de la semilla aplique riego
para que se hidraten las semillas.
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Viernes,
31 de enero del 2014


Sábado, 1 de febrero del 2014
Hoy han
brotado las 4 semillas de la soja, la raíz ha crecido más de 18cm y tamaño es de 15cm.
Del maíz han
crecido un total de 4 semillas en las cuales la raíz ha crecido bastante 2cm.
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Domingo, 2 de febrero del 2014

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Lunes, 3 de febrero del 2014



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Miércoles, 5 de febrero del 2014


Jueves, 6 de febrero del 2014




Sábado, 8 de febrero del 2014
En este día
14 aplique riego y me di cuenta que el crecimiento no era el mismo que antes,
el crecimiento ya iba variando, ya no crecían tan rápido.
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Domingo, 9 de febrero del 2014
Hoy me doy cuenta que no varía su crecimiento solo parece k hay un
pequeño engrosamiento en las raíces y tallo, las hojas comienzan a ensancharse.
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Martes, 11 de febrero del 2014


Miércoles, 12 de febrero del 2014


Jueves, 13 de febrero del 2014


RESULTADOS
La germinación del cultivo de soja y frejol han dado muy bueno
resultados, ya que han germinado un 100%
de semillas de soya y maíz y con estos datos pude darme cuenta que el cuidado y
la observación si ayuda al crecimiento de cualquier semilla, con dedicación y
esfuerzo se llega donde uno anhela, durante esta práctica adquirí nuevos
conocimientos, pude observar
directamente como va germinando, la semilla de soya y maíz y su
desarrollo de raíz tallo hojas.
Esta práctica ha sido muy necesaria para calcular el tiempo de
germinación de una semilla, y poder observar lo que necesita la semilla para su
desarrollo, su habitad ambiente temperatura humedad y también nos sirve para
ver el metabolismo y el desarrollo de las plantas nosotros como futuros
ingenieros agrónomos debemos tener muy claro todos estos puntos de la
germinación de estas semillas y nos llena de mucha riqueza intelectual al
obtener muy bueno resultados en esta práctica y experiencia.
RECOMENDACIONES



Bibliografías
http://es.wikipedia.org/wiki/Glycine_max
http://es.wikipedia.org/wiki/Zea_mays
http://www.botanica.cnba.uba.ar/Trabprac/Tp4/Lagerminacion.html
http://www.porquebiotecnologia.com.ar/index.php?action=cuaderno&opt=5&tipo=1¬e=109
BIBLIOGRAFIAS
http://www.proyectosalonhogar.com/Ciencias/Reproduccion_Vegetal.htm
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